El ex militar sería juzgado más severamente en España

Avala México extradición de Cavallo a Argentina

Agencias

El gobierno de México otorgó su beneplácito para que el ex militar Ricardo Miguel Cavallo, acusado de crímenes de lesa humanidad, sea extraditado de España a Argentina, confirmaron fuentes de la Secretaría de Relaciones Exteriores.

La decisión se tomó con base en el artículo 18 del tratado de extradición vigente entre México y España, y en días pasados fue comunicada a las autoridades del país europeo, las cuales determinarán si lo trasladan a Sudamérica o si es juzgado en su nación.

A Ricardo Miguel Cavallo se le acusa de secuestrar, torturar y asesinar disidentes en la Escuela de Mecánica de la Armada (Esma) durante la dictadura militar que tomó el poder en Argentina. Sus víctimas lo conocían como Sérpico o Marcelo, y también usaba el alias de Miguel Ángel.

En su paso por la Esma también actuó en tareas de inteligencia. En enero de 1979 asumió la responsabilidad del sector denominado Pecera del centro clandestino de detención, en donde sometía a trabajos forzosos y de servidumbre a los detenidos, según el expediente en su contra.

Un año después, agrega el documento, fue enviado al Centro Piloto de París, establecido por los militares argentinos para contrarrestar las denuncias sobre violaciones a los derechos humanos cometidos por la dictadura.

El ex militar fue arrestado en México, donde dirigía el Registro Nacional de Vehículos (Renave), el 24 de agosto de 2000, cuando intentaba huir a Argentina. El ex capitán de corbeta buscaba el amparo de las leyes de punto final y obediencia debida, que impedían la apertura de causas relacionadas con la represión ilegal.

Durante tres años estuvo preso en el país y después fue trasladado a España, luego de que el gobierno de Vicente Fox autorizó la extradición, promovida por el juez Baltasar Garzón.

A pesar del tiempo transcurrido, Ricardo Miguel Cavallo no ha podido ser juzgado en España, porque la Audiencia Nacional decidió, en diciembre de 2006, inhibirse del caso con el argumento de que cuando “hay concurrencia de jurisdicciones, es preferente el locus delicti (el lugar donde se cometió el crimen)”.

Un juez español puso como fecha límite el 31 de marzo próximo para que México decidiera si acepta que el argentino sea trasladado a su país de origen, para que ahí sea juzgado. En la nación sudamericana también es reclamado por el juez Luis Torres, quien investiga los crímenes de lesa humanidad cometidos en la Esma.

El beneplácito del gobierno mexicano ocurre en medio de un proceso jurídico que podría permitir que el ex director del Renave recupere su libertad al haber permanecido preso por casi ocho años sin que se haya iniciado juicio en su contra.

También se registra cuando la decisión de no juzgar a Cavallo en España fue recurrida ante el Tribunal Supremo por la fiscalía de la Audiencia Nacional, que considera que el país europeo es competente para dictaminar sobre los hechos.

En España, la fiscalía reclama para el ex militar una pena mínima de 13 mil 332 años de cárcel por crímenes de lesa humanidad, ya que se le imputan siete asesinatos, 152 delitos de lesiones y 407 de terrorismo. En Argentina la pena sería menor, pues se le juzgaría por cinco causas abiertas. De ahí que el propio Cavallo haya manifestado su deseo de ser trasladado a su país.