Vecinos señalan que vehículos de la demarcación han tirado “toneladas de escombros”
Autoridades de Tlalpan convierten en basurero la barranca del cerro del Maninal
El jefe de Sistemas Mecanizados, Javier Zúñiga, dio la autorización, acusan
En la cañada del paraje El Sabinoco han desaparecido 300 metros de árboles, afirman
Ampliar la imagen Los residentes del Maninal tiene que sortear los escombros Foto: Yazmín Ortega Cortés
Ampliar la imagen Toneladas de escombros son depositadas en la zona Foto: Foto La Jornada
Sobre la carretera Picacho-Ajusco, una serie de anuncios espectaculares que advierten “Tirar cascajo en esta zona constituye un grave delito” son ignorados aun por las propias autoridades de la delegación Tlalpan, que desde el año pasado han convertido la barranca del cerro del Maninal, cauce natural de aguas pluviales en el pueblo de San Miguel Ajusco, en un tiradero de escombros, con la finalidad de rellenarla presuntamente para construir una calle.
Desde el paraje El Sabinoco es posible observar que por lo menos en 300 metros de la cañada los árboles han desaparecido para dar paso a toneladas de desechos de material de construcción, que han sido llevadas, inclusive, en vehículos con el logotipo del gobierno delegacional.
“Calculamos que por lo menos han realizado 500 viajes con los camiones repletos de cascajo”, estimó el representante del comité vecinal, Pablo Lugo Colín, quien señaló, que de acuerdo con informes de los propios trabajadores, el jefe de Sistemas Mecanizados de la demarcación, Javier Zúñiga, es quien ha dado la autorización.
De esta irregularidad ya tiene conocimiento el jefe delegacional, Guillermo Sánchez, a quien el comité vecinal de El Sabinoco le hizo llegar una misiva en la que le exige que se detenga cuanto antes el relleno de la barranca y la tala de árboles, pues los trabajos comenzaron a finales del año pasado, pero una parte de su lecho está completamente tapado.
Los vecinos manifestaron que resulta inverosímil que mientras en la pasada temporada de lluvias los habitantes de la calle Camino al Maninal se organizaron y cooperaron para construir un muro de contención y azolvaron un tubo que pasa por debajo de la carretera Picacho-Ajusco, a la altura del kilómetro 38.5, para que el agua pluvial corriera por el cauce de la cañada, metros abajo se obstruya su paso.
Desde hace dos años, explicó Lugo Colín, comenzaron a llegar nuevas familias a la periferia de San Miguel Ajusco que levantaron casas de lujo, pero para salir del lugar tienen que hacer un rodeo en el poblado, pues sólo hay una entrada y salida hacia la carretera.
“Al principio pensamos que sólo querían rellenar una parte para que sirviera como paso, pero terminaron, y continúan tirando el cascajo a todo lo largo”, comentó, e indicó que todo parece indicar que se pretende habilitar un atajo para conectarlo a una vialidad que, por cierto, también se hizo sobre un tramo de la barranca.
Inclusive, advirtieron que de desaparecer este cauce natural, las casas que se ubican a la orilla podrían en el futuro padecer de inundaciones, pues cuando ocurren precipitaciones pluviales, en lugar de un “simple escurrimiento de agua se llega a transformar en un verdadero río”.
Aunado a esa situación, los vecinos también denunciaron el inicio de una nueva construcción a un costado de la barranca, por lo que exigieron a las autoridades delegacionales informar sobre este proyecto, que convertiría a la calle Camino al Maninal, construida de no más cinco metros de ancho para el uso de carretas y caballos, en el acceso principal para San Miguel y Santo Tomás Ajusco.
De acuerdo con los informes que han recabado, se pretende construir una gasolinera, que agudizaría los conflictos viales que se registran en el callejón, donde no existen ni banquetas ni ningúna protección para los transeúntes.