■ Según Yunes, tampoco impiden que funcione el sistema de pensiones
Ningún amparo otorgado evita aplicar descuentos: ISSSTE
■ Asegura que se aprobaron 37 mil suspensiones definitivas
Ninguna de las suspensiones definitivas otorgadas a trabajadores contra la nueva Ley del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) dice que no se deban aplicar los descuentos por el incremento a los cuotas, previsto en la norma, y tampoco impiden que el Pensionissste empiece a funcionar, afirmó el director de la institución, Miguel Ángel Yunes Linares.
En conferencia de prensa, con motivo del primer año de que el ordenamiento entró en vigor, el funcionario explicó que el ISSSTE no realiza el cobro de cuotas, sino las dependencias públicas. Pero en cualquier caso, dijo, si se ha hecho, con base en lo que establece la ley, a partir del primero de enero, el recurso será rembolsado, en caso de que la autoridad judicial concediera amparos a los trabajadores.
Comentó que ya se constituyó el Pensionissste y se le han transferido los recursos de las cuentas del SAR-ISSSTE, equivalentes a 60 mil millones de pesos. De esa cantidad, abundó, dos terceras partes pertenecen a los trabajadores en activo y el resto a quienes en algún periodo fueron empleados al servicio del Estado.
Falta enviar a los trabajadores la información sobre el monto del “bono de reconocimiento”, que les correspondería en caso de que –como establece la ley– hayan elegido el sistema de cuentas individuales para el retiro. Alejandro Díaz de León, vocal ejecutivo del Pensionissste, explicó que los empleados recibirán esos datos a finales de abril, con el propósito de que estén en condiciones de decidir entre el régimen de pensiones y jubilaciones de reparto y el de ahorro individual.
Respecto de las demandas de amparo, Yunes señaló que el ISSSTE ha sido notificado de la aceptación de 37 mil demandas. Estimó que llegarán más, con motivo de la aplicación de la ley, a partir del primero de enero de 2008. Se dijo respetuoso de los procesos legales, y expresó que aceptará la resolución que sobre el asunto emita la Suprema Corte de Justicia de la Nación.
Por lo pronto, admitió la posibilidad de que los ministros determinen la inconstitucionalidad del artículo 20, el cual se refiere a descuentos previstos en la ley, pero que habrían sido omitidos. Yunes reconoció la necesidad de garantizar a los trabajadores el derecho de audiencia, antes de proceder al cobro de las aportaciones.
Posteriormente se refirió al plantón que la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) mantiene desde hace casi un año frente a las instalaciones de la intitución, y acusó al gobierno del Distrito Federal de no querer asumir su responsabilidad de desalojar la vía pública, sobre todo, añadió, “porque las carpas están vacías”.
Aunque resaltó que la norma es muy positiva, reconoció que ha faltado capacidad para comunicar “lo que sí tiene”. No obstante, continuó, con el paso del tiempo se han ido cayendo los “mitos” sobre las modificaciones legales, por lo que “más allá de eslóganes se debe profundizar en el análisis” y observar los beneficios para el instituto.
Entre ellos, comentó, destaca la aplicación de 8 mil millones de pesos que fueron otorgados por el gobierno federal al aprobarse la nueva ley. En 2008 se destinarán 3 mil 250 millones para la construcción, remodelación y ampliación de unidades médicas, así como para actividades de conservación y mantenimiento. De igual forma, para la adquisición de equipos médicos.
Yunes admitió que el rezago del ISSSTE en inversión e infraestructura es muy grande, a grado tal que en algunos casos, como en el hospital Gonzalo Castañeda, la situación es preocupante. Si existiera posibilidad, consideró, lo mejor sería cerrarlo, pues opera en condiciones inadecuadas.
En relación con las próximas inversiones en infraestructura, comentó el inicio de la construcción, en los próximos meses, de hospitales de alta especialidad en Tultitlán, estado de México, y en Emiliano Zapata, Morelos.
El ISSSTE explora la posibilidad de construir un tercer gran nosocomio en la zona norte del Distrito Federal, con el que se resolverían los problemas de saturación que enfrenta el hospital Primero de Octubre. Existe el proyecto de adquirir el edificio de Ferrocarriles Nacionales, ubicado en la zona de Buenavista, indicó.
Sobre el servicio que se presta a los derechohabientes, Yunes aseguró que actualmente no existe rezago en cirugías o consultas de especialidad, toda vez que se decidió extender el programa extraordinario autorizado en mayo pasado para atender el problema, en el que hasta ahora se han invertido 56 millones de pesos.