■ No debe haber tiempos fatales para discutir la reforma: Zavaleta
“Por ningún motivo” se usará la fuerza pública en San Lázaro
■ Diversos sectores se pronuncian por recuperar el diálogo en las cámaras
■ Lamenta la presidenta del TEPJF que se vulneren las instituciones
La presidenta de la Cámara de Diputados, la perredista Ruth Zavaleta, aseguró que “por ningún motivo” se utilizará la fuerza pública para retirar a los legisladores que mantienen tomada la tribuna en San Lázaro, y aunque llamó a restablecer el diálogo, consideró que no debe haber “tiempos fatales” para discutir la iniciativa de reforma a la operación de Petróleos Mexicanos.
Ante la suspensión de los trabajos del Congreso, debido a las acciones de protesta de legisladores de los partidos que integran el Frente Amplio Progresista (FAP), personajes de diversos sectores, incluidos organismos empresariales, se pronunciaron en favor de que continúe el diálogo en las cámaras, pero también por un debate sereno acerca de la pretendida enmienda.
Juan Ramón de la Fuente, ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México, dijo que es necesario recuperar el diálogo “como instrumento fundamental para la construcción de esos complejos consensos, que llevan tiempo, pero el único camino para llegar a ellos es el debate”.
En tanto, la presidenta nacional del PRI, Beatriz Paredes, pasó la estafeta del análisis de esta iniciativa a los legisladores de su partido, quienes –afirmó– están escuchando las opiniones de organizaciones, gobernadores, dirigentes y, desde luego, de los trabajadores de la paraestatal (cuyo sindicato es bastión del sector obrero del tricolor).
La reacción general de este viernes fue de confianza en que los legisladores alcancen una negociación efectiva que permita la reanudación del diálogo y la discusión acerca de la reforma en materia energética pero, sobre todo, para generar condiciones que eviten otro episodio similar.
En tanto, la magistrada presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), María del Carmen Alanís, lamentó que las acciones encabezadas por el FAP vulneren las instituciones, pero admitió también que el país requiere una reforma constitucional para incluir otras formas de participación de la ciudadanía, como iniciativa popular, referendo, plebiscito y revocación de mandato.
Consideró que a pesar de la ausencia de ese contexto legal para resolver controversias en torno a temas fundamentales para el país, “ningún mecanismo que sea contrario a la ley se justifica en una nación democrática, y tampoco se puede tolerar ese tipo de acciones”.
En sentido similar se pronunciaron el comisionado presidente del Instituto Federal de Acceso a la Información Pública (IFAI), Alonso Lujambio, y el director de Transparencia Mexicana, Federico Reyes Heroles.
La diputada Zavaleta aseguró que no está molesta por la reacción de sus compañeros de partido, pero sí “sorprendida”, porque “supuestamente se había discutido en el FAP una línea de trabajo de debate nacional”, principalmente con los legisladores en tribuna.
Confió en que el próximo lunes se alcance un acuerdo para que se “liberen” las tribunas porque, de lo contrario –advirtió–, tendríamos que reunir a la Junta de Coordinación Política del Senado y a la mesa directiva de la Cámara de Diputados “para tomar una determinación”.
–¿Sede alterna para legislar?
–No lo sé; eso lo definiremos el lunes –respondió.
La perredista aprovechó la coyuntura para reiterar su propuesta de legislar para que haya relección de diputados, idea que impulsó en su momento Felipe Calderón, cuando fue legislador.
Luego, afirmó que más de 40 iniciativas de reforma están pendientes de discusión, como la modificación al informe presidencial, entre otros temas.
A su vez, el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) criticó la iniciativa de reforma calderonista, porque “no se resuelven los problemas de Pemex”. El dirigente del gremio, Martín Esparza, adelantó que el SME se sumará “tanto a los debates como a las acciones” en defensa de la soberanía nacional.
En sentido similar se manifestó la Confederación Nacional Campesina, y convocó al Congreso de la Unión a tomarse todo el tiempo necesario y no andar con prisas para ese análisis.
La dirigencia nacional del Partido Socialdemócrata consideró que la reforma a la paraestatal debe ser discutida exclusivamente en el seno del Congreso de la Unión, con base en un debate en el cual participen todos los sectores interesados y especialistas en el tema energético.
A su vez, Greenpeace México dijo que la iniciativa de reforma energética presentada al Senado es “muestra clara de que al gobierno federal no le importa revertir los efectos del cambio climático en el país”.
Para esta organización civil, la propuesta “sigue apostando a que el crecimiento económico de México esté basado en la renta y las ganancias petroleras; esto es una visión simplista de las necesidades y el futuro de la nación”, advirtió. Dijo que “no tener una perspectiva integral de reforma energética es perder la oportunidad de enderezar el rumbo del país y, por supuesto, esta iniciativa tampoco va a fortalecer a Pemex”.
Con información de Andrés T. Morales, Gabriel León, Carolina Gómez y Susana González