■ Deben trabajar hasta 56 horas semanales para no perder el empleo
Ante la crisis, mexicanos tienen que aumentar su jornada laboral
■ Reporta el IMSS 282 mil 700 despidos de noviembre a enero
Trabajadores mexicanos laboran hasta 56 horas a la semana para poder completar sus ingresos o para no perder su trabajo.
Esto es porque los mexicanos han tenido que incrementar sus jornadas laborales para poder sobrevivir económicamente, incluso 63.90 por ciento de la población ocupada trabaja más de 40 horas a la semana, que es la jornada establecida en la Ley Federal del Trabajo. Y en esta condición se encuentran casi 27 millones 418 mil personas.
Además, 15.5 millones de trabajadores laboran hasta 48 horas a la semana para poder completar sus ingresos, y 6 millones sacrifican hasta sus días de descanso para no perder sus empleos.
A ello se suma el hecho de que los nubarrones recesivos de Estados Unidos ya empezaron a afectar la economía mexicana, y de noviembre del año pasado a enero de 2008 han sido despedidos casi 282 mil 700 personas que estaban incorporadas al Seguro Social.
Un informe titulado Los trabajadores, la prolongada cuesta de enero y la ola de despidos 2008, elaborado por el director de la Escuela de Educación para Trabajadores, Raúl Jiménez Lescas, revela lo anterior y explica que a noviembre de 2007 el IMSS tenía asegurados a 14 millones 945 mil 586 trabajadores.
De este total, 11 millones 933 mil eran permanentes y 3 millones 120 mil eventuales; sin embargo, la cuesta de enero no sólo significó un incremento de precios sino también trajo desempleo, ya que al arranque del año el número de asegurados cayó a 14 millones 62 mil 800 trabajadores, y lo grave es que se perdieron más trabajos permanentes que eventuales, señala la información.
Plantea además que la cuesta de enero ha sido la más prolongada de los últimos años y la más extendida, ya que ha afectado a 27 millones 196 mil 400 trabajadores, que tienen dificultades para adquirir completa una canasta básica. Es decir, 64 por ciento del total de la población ocupada no puede comprar con su salario los satisfactores alimentarios básicos, ya que su costo es de 4 veces el mínimo.
En este sentido apunta que del total de la población ocupada, 3.7 millones de mexicanos no reciben salario alguno, sobreviven de las propinas o trabajan por comida; en tanto, 5 millones 300 mil trabajadores ganan hasta un salario mínimo, es decir, poco más de 50 pesos. Asimismo, 8.8 millones de mexicanos perciben hasta dos minisalarios al día, es decir, poco más de 100 pesos. Por ello la mayoría de los empleados no alcanza a comprar los satisfactores básicos.
El informe indica que también 24.9 millones de trabajadores no reciben las prestaciones de ley y la mayoría de ellos se ubican en el sector industrial y artesanal, agropecuario, el comercio y los que ofrecen servicios personales. Sin embargo, 1.3 millones de profesionistas y técnicos tampoco reciben las prestaciones de ley.