■ Se ahorrarían mil millones al año si médicos generales detectan tumores en estadio inicial: Incan
97% de mujeres con cáncer de mama va a primera consulta en etapa avanzada
■ El Hospital General de México atiende a 12 mil anualmente; también carece de expertos en mastografías
El Hospital General de México también padece por la carencia de técnicos radiólogos entrenados en la lectura de resultados de las pruebas de detección de cáncer de mama. A diario se realizan 40 estudios de este tipo, pero deberían ser más, admitió Francisco Navarro, director médico de la institución, quien señaló que sólo en este hospital, cada año se proporcionan 5 mil consultas de primera vez por dicho tumor.
En tanto, como alternativa al escaso número de especialistas –43 en todo el país–, Arturo Beltrán Ortega, coordinador nacional de los centros estatales de Oncología, propuso que se capacite a los médicos generales en la detección de anormalidades del seno.
Esta medida –dijo– permitiría ahorrar mil millones de pesos al año en los servicios médicos, pues con la palpación que realizara el galeno se podrían detectar los tumores en sus estadios iniciales, cuando la posibilidad de cura es de 90 por ciento.
Contrario a lo que ocurre actualmente, que 97 por ciento de las mujeres con cáncer de mama llega a los servicios oncológicos con tumores avanzados, cuando la posibilidad de erradicarlos es mínima, según explicó el pasado miércoles Alejandro Mohar, director del Instituto Nacional de Cancerología (Incan).
Aumenta número de casos
El especialista resaltó el incremento que ha tenido el padecimiento. En menos de dos décadas se redujo la frecuencia de cáncer cérvico uterino, mientras el de mama aumentó 2.5 veces.
Beltrán Ortega detalló que los servicios médicos dependientes de la Secretaría de Salud (Ssa) cuentan con 18 mil médicos generales, quienes podrían efectuar la exploración mamaria. De esta forma –dijo–, se podría posponer la compra de equipos de detección (mastógrafos) para cuando se cuente con los técnicos especializados en su manejo.
Lo anterior, debido a que en los servicios de salud existen 650 de estos equipos, pero no hay quién los sepa utilizar ni leer los resultados de las imágenes obtenidas de los senos de las pacientes.
El funcionario aseguró que con el apoyo de los galenos generales se podría reducir la mortalidad en un periodo de dos años, y a partir del tercero el ahorro sería de aproximadamente mil millones de pesos al año, periodo en el que 4 mil 200 mujeres pierden la vida por esta causa, y según el titular de la Secretaría de Salud, José Ángel Córdova, en el mismo lapso se diagnostican 5 mil nuevos casos.
Por su parte, Mohar informó que mientras se avanza en la formación de técnicos radiólogos, el Incan iniciará un programa piloto para que los estados donde se tomen las mastografías envíen las imágenes al instituto para su interpretación.
Las pruebas de la estrategia empezarán en las próximas semanas en Guadalajara, pero se incorporarán 18 hospitales de diferentes estados de la República.
Por su parte, Francisco Navarro reconoció que la carencia de estos expertos también afecta al Hospital General de México, centro nacional de referencia, que al año atiende a casi 12 mil mujeres con cáncer de mama, de las cuales, 5 mil son de primera vez.
Explicó que el servicio de Oncología afronta algunas limitaciones por el proceso de renovación del servicio, que incluye la construcción de un nuevo edificio. Hubo necesidad de reubicar los diferentes servicios de oncología y las camas de hospital.
Ha sido problemático, admitió Navarro, pero se ha tratado de mantener la calidad en un hospital que registra una ocupación de 83 por ciento y en el que el promedio de estancia es de 6.5 días.