Clase Política
■ Espaldarazo al TLCAN
Mientras la Confederación Nacional Campesina (CNC) documentó incumplimientos de nuestros “socios” en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), el presidente Felipe Calderón avaló ese acuerdo ante los gobernantes de Estados Unidos y Canadá y rechazó nuevamente la posibilidad de renegociarlo.
También el presidente de Estados Unidos, George W. Bush, se opuso firmemente a cualquier revisión del tratado. “No es el momento de renegociar el TLCAN, ni de apartarse de él, sino de trabajar para hacerlo mejor para todo el mundo”, dijo en una conferencia de prensa conjunta con Calderón y el primer ministro canadiense, Stephen Harper.
En tanto, la CNC demandó a los mandatarios ratificar el Convenio sobre Trabajadores Migrantes y exigió, además, el puntual acatamiento de las disposiciones establecidas en el Acuerdo de Cooperación Laboral de América del Norte (ACLAN), a fin de que cesen las violaciones a los derechos laborales y humanos de los mexicanos que, con documentos o sin ellos, trabajan en los dos primeros países.
En particular, la central campesina manifestó preocupación porque en Estados Unidos van en aumento las prácticas discriminatorias, bajos salarios y condiciones de trabajo injustas en contra de los 12 millones de paisanos que laboran en esa nación.
La cosecha
Sin cumplirse los pronósticos acerca de la normalización de actividades en las cámaras de Diputados y de Senadores, de cualquier forma hubo avances en ese sentido. Destaca el anuncio del presidente de la Comisión de Energía del Senado, Francisco Labastida Ochoa, de que el debate será de casi dos meses –de mayo a julio–, a medio camino entre la propuesta original de 50 días y los cuatro meses exigidos por el Frente Amplio Progresista (FAP).
La propuesta también fue firmada por el perredista Graco Ramírez, en representación del FAP, el cual retiró la exigencia de que no se convoque a periodo extraordinario para tratar la reforma petrolera.
En tanto, siguen en aumento los precios internacionales del petróleo, al grado de que especialistas internacionales estiman que el ingreso de México en este año será superior a 50 mil millones de dólares, cifra impresionante que cambia las perspectivas en torno a la reforma petrolera, pues ya no habrá tanta necesidad de recursos privados y bastaría que el gobierno federal acepte quitar menos recursos a Pemex, a fin de que la empresa estatal pueda invertir en ampliar y renovar sus instalaciones.
En tanto, avanzan las negociaciones entre los gobernadores de los estados petroleros –Veracruz, Tabasco, Tamaulipas, Campeche, Chiapas, Hidalgo, Guanajuato y Oaxaca– que desean consolidar una petición para presentarla al presidente Calderón en la próxima reunión de la Conago, a fin de que se les autoricen más recursos para afrontar los efectos negativos de la industria petrolera.