Astillero
■ Vaciladas de derecha
■ Mentadas, Yunque, narco y celulares
El acólito tequilero de Jalisco, Emilio González Márquez, se confesó en público y dejó constancia sonora del avanzado pensamiento político que anima a la derecha en el poder: acicateado por el récord nacional de ser el político mexicano con más quejas por un mismo hecho ante una comisión de derechos humanos (más de 4 mil por haberle dado 30 millones de pesos –a cuenta de un total de 90– a un patronato para que construya el Santuario de los Mártires Cristeros en el Cerro del Tesoro de Guadalajara), el gobernador cristero se destapó en presencia de su jefe constitucional, el gobernador religioso Juan Sandoval, y aparte de precisar las tablas de tasación materna a las que somete a la crítica y oposición de los tapatíos, se permitió de una vez por todas, y sin estaciones intermedias, enviar a esos ciudadanos discordantes a molestar y dañar aplicadamente a sus progenitoras.
Al otro día, ya en la cruda valoración de los hechos, EGo Márquez se impuso, entre otras, la penitencia de ofrecer disculpas, e hizo una especie de renuncia ética a seguir como mandatario, pues dijo que Jalisco “no puede tener un gobernador con ese léxico”, que es “impropio de un gobernador”. El ex presidente nacional del movimiento sinarquista y presunto candidato neocristero a la presidencia en 2012 ha ido tapando un escándalo con otro, pues al de maternidades que acaba de protagonizar le antecedió el de la visita a Álvaro Uribe en Cancún en días pasados (room service) para apoyar los actos del colombiano acusado de asesinatos internacionales, masacres y relación con el narcotráfico. El gran Emilio se ha elevado ahora a los niveles del chiapaneco Juan Sabines (padre del actual gobernador), quien en su último informe de actividades como mandatario interino mandó también a chingar a su madre a sus enemigos, y del famoso ciclista mexicano del siglo pasado, Porfirio Remigio, quien preguntado por el cronista de televisión Paco Malgesto acerca de cuál boxeador le parecía mejor, si el Ratón Macías o el Toluco López, contestó desparpajadamente al aire: “pa’mí que los dos son ojetes”.
Otro gobernador de ultraderecha, Marco Antonio Adame, fundador del movimiento católico Testimonio y Esperanza y organizador de peregrinaciones al Cerro del Cubilete, establece, mientras tanto, vínculos entre El Yunque, al que pertenece, y la Secretaría de la Defensa Nacional, pues ésta lo invitó a dar una conferencia a generales de división y brigada, coroneles y al director de la Escuela Superior de Guerra. Según la información difundida por el gobierno de Morelos, las “autoridades de la Sedena reconocieron a Adame por su aportación al progreso nacional”. ¡Sopas, El Yunque se pone no al rojo vivo sino al verde olivo!
En Mexicali, el comandante de la Segunda Región Militar, general Sergio Aponte Polito, dio a conocer una detallada lista de funcionarios y policías de Baja California y sus municipios que están al servicio de narcotraficantes. Entre otros datos, el divisionario aseguró que Sonia Patricia Navarro ha sido solapada por las tres últimas administraciones estatales panistas para que funja como protectora y “fiel representante” del cártel de los hermanos Arellano Félix. Navarro, sin tener la edad legalmente requerida para ocupar ese cargo, fue designada subprocuradora de justicia en Ensenada con la “complacencia” del entonces gobernador Alejandro González Alcocer (actualmente senador panista muy ofendido por las criminales tomas de las tribunas legislativas) “con quien se le vinculó sentimentalmente”. Antes, la ejemplar Navarro había servido al panista Eugenio Elorduy y actualmente es directora de Control y Seguimiento de la procuraduría estatal y estaba en vías de ser nombrada coordinadora de subprocuradores. El general Aponte Polito ha hecho denuncias similares, aunque no tan detalladas, en lugares como Sinaloa, donde el apalabrado gobernador Jesús Aguilar Padilla presionó para que lo mandaran a otra entidad.
Un funcionario de la comitiva de Felipe Calderón ganó súbita fama en medios estadunidenses de comunicación por haberse alzado con un tesorito de celulares profundos (Blackberry) durante algún momento de la hermética y blindada sesión cumbre de la Alianza para la Seguridad y Prosperidad de América del Norte (ASPAN). Rafael Quintero Curiel, miembro del equipo del baterista Max Cortázar (usuario de baquetas en la coordinación de comunicación social del Felipato), presentó su iniciativa de reforma telefónica en un momento de descuido de los adelitos norteamericanos pero fue cachado por las cámaras, mas no de diputados y senadores celosos y vigilantes, sino las del circuito interno de televisión en las que se veía cuando el hombre de Los Pinos (es decir, Quintero Curiel) se apropiaba del material preciado y salía de escena.
Pero nada de lo antes descrito parece tener la importancia del escándalo por el ahumadazo fallido en que Carlos Navarrete y López Obrador fueron grabados en discusión respecto a lo que se debe hacer en las tribunas de las cámaras (¡oh, parece que el tabasqueño calificó de “vacilada” al sacro debate priánico!) o del suspenso montado en razón del momento en que esos espacios legislativos deben ser devueltos a la “normalidad democrática”. Hipocresías y conveniencias.
Astillas
Hoy, a las seis de la tarde, se hablará de mitos, realidades, testimonios y propuestas relacionados con el petróleo en el Club de Periodistas (Filomeno Mata 8, en el Centro Histórico del Distrito Federal), con la participación del ingeniero Felipe Ocampo Torrea, autor de un libro sobre el tema; Jaime Cárdenas Gracia, ex consejero del IFE y académico de la UNAM, y el tecleador firmante de las presentes líneas. Al siguiente día, ese mismo periodista astillado estará en el auditorio de la subdelegación Villa Coapa (delegación Tlalpan), en Cárcamo 3755, colonia Villa Coapa, para hablar de Los medios de comunicación golpistas. Y, mientras los defensores del petróleo como patrimonio nacional se alistan para marchar este domingo, a partir de las 10 horas (¡sacrilegio cronológico!), del Ángel de la Independencia al Zócalo, ¡feliz fin de semana!