■ La mayoría brillaron por su ausencia durante las comparecencias
Pese a exigir trabajar, panistas faltan a sesiones de la Asamblea
■ De güevones calificaron a diputados que el martes tomaron la tribuna
El estruendo que con gritos y pancartas provocaron los diputados del PAN en la frustrada sesión del martes pasado sonaba convincente: “¡queremos trabajar! ¡queremos trabajar”, exigían a los perredistas que habían tomado la tribuna de la Asamblea Legislativa.
Pero los hechos de los dos días recientes demostraron lo contrario: durante las comparecencias de tres servidores públicos y el ombudsman de esta ciudad ante el pleno de la ALDF estuvieron presentes, en promedio, ocho de los 17 integrantes de la bancada blanquiazul.
La enjundia del panista Miguel Errasti no dejó lugar a dudas el martes cuando, portando un cartel con la frase “¡queremos trabajar!”, subió hasta la mesa directiva de la Asamblea para disputar, codo a codo, el espacio con Humberto Morgan, del sol azteca. Sin embargo, el miércoles y ayer jueves brilló por su ausencia durante la rendición de cuentas del jefe de la policía, Joel Ortega; el contralor general, Ricardo García Sáinz; el procurador Rodolfo Félix y el ombdusman, Emilio Álvarez Icaza.
La combatividad que mostró Ezequiel Rétiz el martes 22 no fue la misma durante estas comparecencias, en las cuales durante muy pocos momentos se le vio.
El día de la toma por perredistas encabezados por Agustín Guerrero, los panistas reclamaban a grito abierto el desalojo de la tribuna. Desde sus curules, Jorge Romero y José Antonio Zepeda repetían incesantes a los del sol azteca: “flojos... güevones... pónganse a trabajar”.
De estos adjetivos nadie se acordó el miércoles, cuando en el auditorio Benito Juárez, de las instalaciones de la ALDF en el Zócalo, sólo siete, de un total de 17 panistas, aguantaron estoicos el calor y los apretujones, entre ellos su coordinador Miguel Hernández Labastida, Kenia López, Margarita Martínez, Carmen Segura y Paula Soto. El resto, o bien salía a tomar aire, o subía a su oficina a estar más cómodo o en definitiva no se presentó, como Daniel Ramírez del Valle y Elvira Murillo.
Ayer, la escena fue prácticamente similar. En promedio, de seis a ocho diputados del PAN estuvieron atentos a la comparecencia del procurador Félix Cárdenas y del ombudsman capitalino. Incluso, a las cinco de la tarde, cuando el mensaje de Emilio Álvarez Icaza iba a la mitad, en las curules de Acción Nacional sólo estaban presentes Jacobo Bonilla, Jorge Triana, Jorge Romero, Elvira Murillo, Carmen Segura, Paula Soto y su coordinador, Miguel Hernández.
Aunque el caso de los panistas ayer no fue el único. Con los dos comparecientes hubo más asesores o invitados que legisladores, a pesar de que las comodidades eran radicalmente opuestas a las del día anterior.
Pocos, muy pocos legisladores en el pleno. Faltaban prácticamente de todas las fracciones.
–¿No que querían trabajar? –cuestionó un asesor del Panal.
–Bueno, eso decían –respondió a su lado uno de sus compañeros de esa bancada.