■ Los asiáticos copian los diseños de la prenda tradicional
Amenazan chinos la confección de guayaberas; entran al mercado de EU
Fabricantes mexicanos de guayaberas, una elegante camisa típica del Caribe, luchan por mantener su mercado de exportación clave en Estados Unidos, donde fabricantes asiáticos ganan terreno.
Muchas fábricas en el estado de Yucatán, hogar de la industria mexicana de las guayaberas, han cerrado en los últimos años ante la competencia de productores de Asia que copian los diseños y venden a precios recortados en mercados de alto volumen como los de Texas, California y Florida.
“Con la introducción de las guayaberas de los países asiáticos nuestra producción ha bajado”, precisó Lourdes Rodríguez, directora de la Cámara Nacional de la Industria del Vestido (Canainves) en el estado de Yucatán.
Caracterizada por sus pliegues frontales, múltiples bolsillos y cuello abierto, la guayabera es una prenda muy utilizada por hombres de negocios y políticos en las regiones tropicales de Latinoamérica, desde México a Venezuela, donde el calor hace poco práctico vestirse de traje.
La exportación de guayaberas hechas en Yucatán –que representa poco para la industria mexicana de la ropa que genera 7 mil millones de dólares anuales– ha caído 20 por ciento en los últimos dos años, informó el gobierno estatal. No había cifras confiables de la industria disponibles.
El problema no es exclusivo de los productores de guayaberas, la mayoría de los fabricantes de exportación de México enfrentan una competencia más agresiva. En 2003, China superó a México como el segundo mayor exportador a Estados Unidos, y el año pasado desbancó a Canadá del primer lugar.
En la última década, la guayabera –que se cree tuvo su origen en Cuba o en Yucatán– ha ganado popularidad para ser usada en bodas y actos al aire libre.
Las guayaberas también se han convertido en prendas de moda en Estados Unidos, especialmente en zonas con fuerte presencia latina como Los Angeles y Miami. Sin embargo los beneficiados han sido los fabricantes asiáticos, que cuentan con mano de obra y materiales más baratos, dicen productores mexicanos.
“Nosotros no tenemos acceso a mercados populares como Wal-Mart o Kmart, nos piden precios que no podemos dar”, expresó Raúl Maglioni, un fabricante de guayaberas en Mérida, la capital de Yucatán.
“Si te piden una guayabera de 5 o 6 dólares, no podemos, no tenemos acceso a este precio”, explicó en su fábrica, en la que decenas de mujeres mayas cosían guayaberas de mezclilla color púrpura, pedidas especialmente por un cliente estadunidense.
Las exportaciones de ropa mexicana a Estados Unidos han caído desde su mejor momento en 2000, al tiempo que las exportaciones de China a ese mercado han aumentado constantemente. Además, la esperada recesión económica en Estados Unidos, destino de 80 por ciento de las exportaciones de México, presionaría más la industria.
México alguna vez fue visto como un país con mano de obra barata, pero ahora sus fabricantes luchan contra los exportadores de China y de otros países asiáticos, donde los salarios son todavía más bajos y los gobiernos ofrecen incentivos a los inversionistas.
Para evitar la competencia por precio, muchos fabricantes de guayaberas mexicanos están enfocando sus ventas a través de boutiques estadunidenses como la tienda San Angel Folk Art, en la que los clientes están dispuestos a pagar sumas más altas por lo que consideran un producto genuino.
“Conocemos gente que las manda hacer en China algunas veces, pero el dueño de la tienda ama a México y ha creado una relación con la gente que las hace para nosotros. La calidad es increíble”, señaló Leigh Anne Lester, gerente de la tienda en San Antonio, Texas.
Para darles un toque característico que las distinga de las versiones hechas fuera de México, los diseñadores en Yucatán han agregado bordados más elaborados o versiones para mujeres.
Este mes, los senadores mexicanos aprobaron una moción para que el gobierno proteja a los fabricantes de guayaberas de Yucatán, destacando características como la calidad de sus productos. “Es importante que nos ubiquen en el mapa como los buenos”, expresó Rodríguez.