■ El organismo interamericano, “inconforme y decepcionado” por respuesta de separatistas
Denuncia Bolivia en la OEA una conspiración contra el gobierno que “puede traer violencia”
Washington, 26 de abril. Bolivia denunció hoy que hay una “conspiración” contra el gobierno del presidente Evo Morales que “puede desembocar en violencia”, al informar ante la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre los referendos autonómicos unilaterales convocados por cuatro regiones para dividir el país.
El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, se declaró “inconforme y decepcionado” por la respuesta de los prefectos opositores a un pedido para crear una instancia de diálogo con el gobierno, al eludir una reunión que pueda evitar el riesgo de enfrentamientos en Santa Cruz.
La respuesta recibida por el secretario de Asuntos Políticos de la OEA, Dante Caputo, remitida por el prefecto (gobernador) de Santa Cruz, Rubén Costas, fue muy general cuando se esperaba que precisara “fecha, hora y lugar” para un encuentro con La Paz para buscar una salida a la crisis.
La OEA quería concretar la reunión antes del 4 de mayo, fecha del referendo convocado por Santa Cruz, al estimar que si no hay negociación previa puede haber derramamiento de sangre, luego que los líderes regionales han insistido en seguir adelante pese a los actos “desesperados” del gobierno.
No obstante este contratiempo, Caputo dijo haber sugerido a Costas discutir “avances” en busca de un canal de diálogo, y anunció la posibilidad de una nueva visita a Bolivia a partir del martes, una misión “indirecta” para reunirse con los prefectos de la región.
Aparte del referendo en Santa Cruz, están convocadas para junio consultas autonomistas en el departamento de Tarija, que alberga más de 80 por ciento de las enormes reservas de gas de Bolivia, y en los distritos amazónicos de Beni y Pando, que también se oponen al gobierno de Morales.
“Lo que está sucediendo en Bolivia es una verdadera conspiración contra el poder democráticamente conquistado de parte de pequeños grupos, que nunca estuvieron de acuerdo con que un indio los gobierne”, aseveró el canciller David Choquehuanca, en la sesión especial de la OEA.
Los que “bloquean la negociación –advirtió– deben asumir las consecuencias de un posible escenario de violencia y confrontación entre bolivianos”, mientras los representantes de los 34 países miembros del ente regional daban su pleno respaldo a La Paz.
El canciller, quien reafirmó el rechazo de su gobierno a los estatutos autonómicos porque buscan dividir al país, concluyó que Morales ha llamado a los movimientos sociales para que se abstengan de protestas contra la “consulta ilegal” de Santa Cruz, y que incluso no se hará uso de la fuerza pública a pesar de que “la Constitución nos faculta para ello”.
Mientras Bolivia busca que Estados Unidos se pronuncie sobre esta crisis, el viceministro Sacha Llorenti pidió al prefecto Costas que explique su anuncio de la víspera de que después del referendo será proclamada una “segunda república en Bolivia”.