■ Difícil, una solución a la crisis de rehenes de la guerrilla, admite el canciller francés
Auditoría a base de EU en Ecuador, demanda la Asamblea Constituyente
■ Quito sospecha que un avión estadunidense de ese centro militar participó en ataque a las FARC
■ Exigen una comisión para investigar la injerencia de la CIA en los asuntos internos ecuatorianos
Ampliar la imagen El gobernante ecuatoriano, Rafael Correa, recibe en el palacio presidencial al canciller francés Bernard Kouchner (izquierda), de gira por la región Foto: Ap
Quito, 29 de abril. La Asamblea Constituyente, que redacta la nueva Carta Política de Ecuador, reclamó hoy al gobierno una auditoría a la base donde operan tropas estadunidenses ante sospechas de que Washington participó en un ataque contra las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en territorio ecuatoriano.
El órgano, controlado por el oficialismo, aprobó una resolución en que demanda al presidente Rafael Correa una auditoría al Centro Operativo de Avanzada (COA) que administra Washington en la base de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE) en el puerto pesquero de Manta (suroeste).
La Constituyente agregó que esa auditoría deberá “establecer el cumplimiento del convenio suscrito con el Estado ecuatoriano y el sustento legal de otras actividades que hayan realizado”.
Un acuerdo de cooperación, que concluirá en noviembre de 2009 y no será renovado por el gobierno de Correa, permite a Washington desde 1999 el uso de la base de la FAE en Manta para operaciones aéreas antidrogas.
Quito sospecha que un avión estadunidense que despegó del COA colaboró en el bombardeo colombiano contra las FARC en Ecuador el primero de marzo, que dejó una veintena de muertos –incluido un ecuatoriano, cuatro mexicanos y el jefe insurgente Raúl Reyes– y mantiene rotas las relaciones entre ambos países.
La Constituyente también apoyó la conformación de una comisión civil y militar, como propuso Correa, para investigar la posible “injerencia” de la estadunidense Agencia Central de Inteligencia (CIA) en los asuntos internos de Ecuador y rechazó las actitudes “discriminatorias y xenófobas” contra los colombianos desplazados por la violencia en su país.
En medio de la crisis diplomática con Colombia, el mandatario denunció que el servicio de inteligencia ecuatoriano está “totalmente infiltrado por la CIA”, lo cual causó una crisis en el mando militar al ser removidos el entonces ministro de Defensa, Wellington Sandoval, tres de los cuatro miembros de la cúpula castrense y el jefe de la policía.
A todo esto, el canciller francés, Bernard Kouchner, admitió que se vislumbra difícil una solución a la crisis de los rehenes de la guerrilla de las FARC, entre ellos la colombo-francesa Ingrid Betancourt, poco antes de partir hacia Quito, en donde continuará una gira por la región.
El ministro ecuatoriano de Seguridad, Gustavo Larrea, se entrevistó durante casi una hora con Kouchner, en el contexto de la gira que empezó por Bogotá y terminará este miércoles en Venezuela, donde hablará sobre el tema con el presidente Hugo Chávez.
Esta visita “abre un canal político de voluntad” en favor de la “liberación de los secuestrados; de exigencia, de pedido por esa liberación. Ese es el canal que abre, ahora un canal real hacia la liberación es un paso posterior”, afirmó el ministro al fin de su diálogo.
Betancourt, secuestrada hace seis años, forma aparte de un grupo de al menos 39 rehenes a quienes las FARC proponen canjear por unos 500 de sus guerrilleros presos en cárceles colombianas y tres de ellos en Estados Unidos.