■ Hijas de desaparecidos rechazan dar muestras para examen de ADN
Con pruebas genéticas, la PGR busca determinar si murieron eperristas
La Procuraduría General de la República (PGR) ha encontrado varios cadáveres en Oaxaca, dos de los cuales pueden corresponder a los eperristas desaparecidos Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz, revelaron fuentes gubernamentales.
Como parte de las pesquisas por ese caso, la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) pretende tomar muestras de saliva de Nadine Reyes y Margarita Cruz, hijas de los eperristas desaparecidos, con el fin de realizar pruebas de ADN que ayuden a corroborar si los cadáveres efectivamente corresponden a los guerrilleros.
El pasado miércoles acudieron ambas a las instalaciones de la PGR en la ciudad de México, donde agentes del Ministerio Público les pidieron que accedieran a realizarse las muestras periciales, y se les informó sobre la posibilidad de que sus padres estén muertos.
En entrevista, Nadine Reyes indicó: “La SIEDO estaba solicitándonos unos análisis de ADN”.
La dependencia “quería que nos practicáramos unas pruebas mediante saliva para ellos tenerlas resguardadas en el banco de sangre y poder realizar los estudios de esos cuerpos que han estado encontrando”.
Sin embargo, Nadine y Margarita no accedieron a la petición de la PGR, con el argumento de que nunca recibieron solicitud formal de la dependencia, y exigieron conocer los elementos con que cuentan las autoridades para suponer que sus padres perdieron la vida.
Según las hijas de los eperristas, la SIEDO no les quiere dar acceso a la averiguación previa abierta por la desaparición, pese a que ellas forman parte del asunto, pues fueron las denunciantes de los hechos.
“Esperamos que se entable de una buena vez el diálogo (con el EPR); yo siento que se le están dando largas de parte del gobierno federal”, indicó Nadine.
En tanto, fuentes gubernamentales indicaron que en los próximos días la SIEDO enviará una petición de colaboración por escrito a Nadine y Margarita para que accedan a depositar muestras de saliva que sirvan para cotejar el ADN de los cadáveres encontrados en Oaxaca.