Riesgo de deslaves en el suroeste chino
Funcionarios chinos advirtieron ayer sobre los peligros de la tensión cada vez mayor sobre las represas de la provincia de Sichuán tras el terremoto que el lunes sacudió el suroeste de China, así como de deslaves en frágiles costados de colinas donde se pronosticó lluvia para los próximos días, informó la agencia oficial Xinhua.
Dos estaciones hidroeléctricas en el condado de Maoxian, donde 7 mil residentes y turistas permanecían varados, estaban seriamente dañadas.
El primer ministro chino, Wen Jiabao, que supervisa las operaciones de salvamento desde Beichuán, urgió a los equipos de rescate a salvar vidas, e instó a hacer todo lo posible para reabrir las carreteras que llevan a Wenchuán, epicentro del temblor.