■ Por sus ácidas críticas, Chávez ofrece disculpas a la canciller alemana Angela Merkel

Propone la cumbre de Perú medidas para enfrentar hambruna mundial

■ El presidente venezolano lima asperezas por el “por qué no te callas” del rey Juan Carlos de España

■ Reunión alterna termina con condenas a trasnacionales europeas por sus daños al ecosistema de AL

Claudia Herrera Beltrán (Enviada)

Lima, 16 de mayo. La crisis que amenaza con hambrunas a millones de habitantes y con graves conflictos sociales fue reconocida por la Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de América Latina y el Caribe-Unión Europea, que propuso una serie de “medidas” para enfrentar los aumentos de precios y la escasez de alimentos.

Y lejos de las tempestades que se avecinaban, la cumbre también fue escenario de reconciliaciones entre algunos jefes de Estado. Convertido en figura central, el presidente venezolano, Hugo Chávez, ofreció una disculpa a la canciller alemana, Angela Merkel, y charló con el jefe del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, lo que marcó su rencuentro tras el conocido incidente en Chile del “por qué no te callas” del rey español Juan Carlos.

Días antes la delegación cubana alertó respecto de la crisis alimentaria, tema que no estaba contemplado originalmente en las discusiones pero que terminó por absorber los trabajos.

Desde la apertura de la conferencia cumbre, que reunió a medio centenar de jefes de Estado y de gobierno, el presidente peruano, Alan García, puso el dedo en la llaga y propuso ir más allá de “lo ritual y la buena intención” fijando metas concretas para enfrentar la crisis alimentaria que se cierne sobre la humanidad y puede convertirse en un “infierno”.

Frente a la amenaza que representa que cientos de personas padezcan hambre en el mundo en medio de la abundancia, propuso incrementar en 2 por ciento la producción de alimentos.

“Que no caiga la vergüenza de no haber hecho algo concreto y concertado para evitar este infierno que se cierne sobre cientos de millones de seres humanos carentes de alimento dentro de poco tiempo, con el aumento de los fertilizantes y biocumbustiles, porque otros consumen mucho más y hay cada vez menos para los pobres de la Tierra”, afirmó el mandatario con su estilo elocuente.

Regalo inesperado

García dijo que si tuviera que regalar algo a sus invitados les daría una papa, que ha salvado de la hambruna a tantos pueblos desde Irlanda hasta Ucrania.

Agregó: “Estoy seguro que la papa es el mejor símbolo de la amistad de nuestros pueblos. La papa modesta, ignorada, que no es tan estética como otras cosas, es fruto del esfuerzo de los peruanos, es (también) el símbolo de nuestra unión, alimentación”.

Al término de los trabajos, la presidenta chilena, Michelle Bachelet, leyó la relatoría de la mesa sobre pobreza y desigualdad social y advirtió que es urgente responder a los desafíos más graves, en especial frente a la crisis alimentaria, que puede constituirse en una enorme barrera para el cumplimiento de las metas del milenio y desatar graves conflictos sociales, como sucede en la actualidad en Haití.

Para enfrentar este problema, planteó que se apoye a Naciones Unidas, y propuso incrementar un fondo en la materia y una reunión especial para dar impulso a los objetivos de milenio, además de que hizo un llamado urgente para que concluyan las negociaciones de la Ronda de Doha.

El presidente Chávez ya se había sumado a esta iniciativa con la propuesta de creación de un fondo para la producción de alimentos y medicamentos destinados a los más pobres de América Latina y el Caribe, con ayuda de los países de la Unión Europea.

La Declaración de Lima también incluyó un llamado a concluir las negociaciones de los acuerdos de asociación de la Unión Europea con la región y el compromiso de promover el bienestar de las poblaciones con sociedades más inclusivas e integradas.

También se acordó generar un crecimiento económico estable y sostenido con impacto redistributivo, y establecer acciones de cooperación energética birregional. Además se subraya “la importancia de la cooperación” en la preservación del manejo sostenible de la biodiversidad.

Borrón y cuentas nueva

Desde la sesión de apertura de la cumbre, el venezolano Chávez buscó dejar en claro que venía a la capital peruana en son de paz. A su llegada a Lima, el gobernante, de pie y sonriente, saludó con un apretón de manos a Rodríguez Zapatero y comenzó con él una breve charla, mientras el presidente de Bolivia, Evo Morales, permanecía como espectador.

El diálogo distendido culminó con una palmada en el hombro dada por Chávez a Rodríguez Zapatero. Fue el primer contacto que ambos mandatarios tuvieron desde que el rey de España, Juan Carlos de Borbón, mandara callar a Chávez durante la última Cumbre Iberoamericana, efectuada en Santiago de Chile, hecho que generó un impasse diplomático entre sus respectivos países.

En plan conciliador, el gobernante venezolano argumentó que no había llegado a la cumbre a pelearse con nadie, sino a dialogar con sus amigos, sus homólogos mandatarios y altos dignatarios.

Paralelamente, la Cumbre de los Pueblos concluyó en la Universidad Nacional de Ingeniería con un pronunciamiento de condena a las trasnacionales europeas por el daño al ecosistema en los países de América Latina.

Esta declaración, además de rechazar el acuerdo comercial entre América Latina y la Unión Europea, contiene los comentarios y recomendaciones de los movimientos de mujeres, campesinos y gremiales que han participado en la Cumbre de los Pueblos, que se inició el pasado 13 de mayo

Este evento alterno se realizó en medio de descalificaciones de las autoridades peruanas. Con sarcasmo, el presidente del Consejo de Ministros, Jorge del Castillo, se refirió al partido de futbol que se jugó durante la Cumbre de los Pueblos, en la que participó el presidente boliviano.

“Si un partido de fútbol significa el éxito de una cumbre, es excelente, en buena hora para ellos; pero la verdadera cumbre está en la junta de los presidentes, de los cancilleres”, dijo Del Castillo.