■ El TLC impide proteger las producciones nacionales, deplora Marina Stavenhagen
Demanda el Imcine imponer cuotas al cine de Hollywood
■ Se debe regular la presencia avasalladora de las películas de EU, porque va contra la libre competencia, argumenta
■ No se trata de que sea obligatorio ver cintas mexicanas; “nadie quiere que las vayan a ver por lástima”, dijo la guionista en el mercado de filmes del festival de Cannes
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Madonna y la actriz Sharon Stone a su llegada a la alfombra roja antes de la proyección de Che, película dirigida por Steven Soderbergh, en el festival de Cannes
Foto: Reuters
Cannes, 21 de mayo. México debería imponer cuotas al cine de Hollywood para evitar la competencia desigual de éste con el cine nacional, señaló aquí la directora general del Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine), Marina Stavenhagen.
En el contexto del mercado del filme del festival de Cannes, Stavenhagen pidió una regulación para el mercado audiovisual en México, que podría incluir –dijo– cuotas al cine extranjero, como sucede en Europa, para evitar el problema de distribución que existe.
“Es importante que el mercado se regule porque es inequitativo”, declaró la guionista, directora del Imcine desde hace año y medio.
“Se debe regular la entrada y la presencia –absolutamente avasalladora (en México)– del cine hollywoodense, ya que va en contra de la libre competencia”, subrayó Stavenhagen.
“En términos inclusive del libre mercado creo que el hecho de que el verano cinematográfico avasalle el mercado, la oferta, la distribución, con ocho o diez títulos únicamente durante cuatro meses, es terrible para cualquier otro cine que no sea el estadunidense”, dijo.
“México no tiene un mercado regulado. No tenemos un cine protegido por las leyes y no reglamentamos la presencia del cine extranjero en nuestro país.”
Consideró que la situación de avasallamiento del cine de Hollywood en el país “va en contra de la diversidad cultural y de la oferta, y perjudica los derechos del consumidor, quien tendría que poder elegir lo que quiere ver”.
Stavenhagen subrayó, en el estand que tiene el instituto que dirige en el mercado de películas de Cannes, que el cine debe estar más protegido porque “es una industria de la protección de contenidos, y ésos nos dan soberanía.
“Hay una resistencia cultural necesaria sobre la cual tenemos que trabajar; tenemos que preservar esos espacios”, insistió en Cannes, donde desde el sábado pasado promueve el cine mexicano.
Consideró que el modelo de cuotas que se ha impuesto en Europa para evitar la distribución en avalancha de productos audiovisuales de Estados Unidos podría ser útil para México.
“Las cuotas tienen su razón de ser, pero no ponerlas al cine nacional, que deba verse obligatoriamente, porque nadie quiere que vayan a ver nuestro cine por lástima”, explicó.
Por otro lado, consideró que el Tratado de Libre Comercio (TLC) “bloquea esta posibilidad (de regular al cine), porque la cinematográfica, como otras industrias culturales, debió haberse protegido”.
Stavenhagen señaló que, pese a la competencia desigual del cine mexicano con el hollywoodense que invade las pantallas, las películas mexicanas están cada vez más presentes en las salas de México.
“Hay diversidad, variedad y oferta inusitada de cine mexicano en las pantallas nacionales. Tenemos buenos resultados: el promedio de asistencia por copia está perfectamente al nivel de otro cine”, señaló.
La directora del Imcine destacó que el año pasado se estrenaron 43 películas mexicanas, y que tras varios años de crisis “el público está logrando encontrar cintas mexicanas en pantalla”.