■ Se sustraerán recursos destinados a desastres y pobreza, explica el titular de Economía
Al combate a la crisis alimentaria, parte de los fondos por excedentes petroleros
■ Carstens pide a los productores agropecuarios aprovechar la coyuntura para obtener beneficios
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El panista Santiago Creel MIranda escucha al diputado priísta Emilo Gamboa Patrón, durante la sesión de ayer de la Comisión Permanente
Foto: José Antonio López
El secretario de Economía, Eduardo Sojo, advirtió que los excedentes petroleros que se utilizaban para hacer frente a desastres naturales y programas extraordinarios de combate a la pobreza en entidades con alta marginación, entre ellas Chiapas, Oaxaca y Guerrero, ahora se destinarán a combatir la crisis alimentaria.
No obstante, reiteró que para enfrentar el alza de los precios internacionales de alimentos, este año se destinarán 200 mil millones de pesos provenientes de los excedentes derivados del mayor precio del crudo en el ámbito internacional.
El funcionario hizo la declaración durante una gira de trabajo por Chiapas, donde promueve la instalación de microempresas.
En 2006 ese estado recibió mil 33 millones de pesos de los excedentes petroleros para hacer frente al desastre ocasionado por el huracán Stan. En 2007 se recibió una cantidad de estos mismos recursos para proyectos de infraestructura y combate a la pobreza en regiones indígenas.
“Hemos salido bien librados”
Ante la crisis alimentaria, en muchos países se van a ver desaparecidos o mitigados los esfuerzos que se han hecho contra la pobreza, dijo. En México, añadió, “hasta ahora hemos salido bien librados, pero ya se anunciaron las medidas para proteger a los hogares con menos ingresos, para incrementar la producción y para abastecer los recursos. Con eso esperamos que no se vea afectado el combate a la pobreza” Destacó que el país “sigue teniendo el índice de inflación más bajo de América Latina”.
En Guadalajara, Jalisco, el secretario de Hacienda, Agustín Carstens, pidió a los productores del campo que aprovechen la coyuntura de la crisis alimentaria para vender mejor sus productos.
Sostuvo que el gobierno federal ha dado una respuesta “responsable e integral” a la carestía de los alimentos.
Sin anunciar nuevos recursos a los 6 mil 300 millones de pesos ya presupuestados para apoyar en 2008 a los agricultores, el funcionario explicó que esto permitirá que el sector, antes que sufrir con la carestía, pueda aprovechar “esta tendencia de los precios para aumentar sustancialmente la productividad de sus cultivos y con ello su producción y sus ingresos”.
Durante el acto inaugural del Programa Estratégico para el Financiamiento del Campo, realizado en la capital tapatía, Carstens puntualizó que este año “el monto de financiamiento directo impulsado por la banca de desarrollo equivaldría a una quinta parte del crédito total que espera otorgar la banca comercial”.
Mientras el funcionario federal hablaba de las bondades del financiamiento destinado –sobre todo– a compra de maquinaria, decenas de trabajadores del ingenio de Bellavista se manifestaron afuera con enormes mantas en las que pedían el pago de la zafra antes que cualquier préstamo.