■ Firma José Lema Labadie un convenio de colaboración con la Canacintra
Entrará a la UAM sólo uno de cada cuatro aspirantes, advierte el rector
■ Niega Marón Manzur que el sector privado prefiera contratar a egresados de escuelas particulares
Sólo podrá ingresar a la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) uno de cada cuatro aspirantes, debido a la falta de cupo, afirmó el rector de esa casa de estudios, José Lema Labadie.
En el contexto de la firma de un convenio de colaboración entre la universidad y la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), el rector expresó que “de los 40 mil aspirantes a entrar a la UAM, ingresarán poco más de 10 mil. Nos hubiera gustado poder aceptar otros mil para llenar los espacios de carreras de baja demanda, pero no es posible”.
Recordó que la institución a su cargo invierte anualmente en cada estudiante alrededor de 40 mil pesos, por lo que los recursos no alcanzan para abrir más espacios, señaló.
El convenio suscrito ayer entre ambas entidades establece la creación del centro de asesoría empresarial UAM-Canacintra, cuya finalidad es que la institución educativa participe en la industria nacional con asesorías, análisis y estudios sectoriales.
“Este centro abre las puertas a nuevos proyectos de la universidad e implica un importante avance en la colaboración con la Canacintra. Ya no es sólo el servicio social, sino una participación profesional dentro de las industrias”, puntualizó Lema Labadie.
Explicó que 94 por ciento de los egresados de la UAM está incorporado en el mercado laboral, aunque de éstos –dijo–, 80 por ciento está empleado en sectores que no tienen que ver con lo que estudiaron, por lo que confía en que “este convenio de colaboración general con la Canacintra favorezca a que todos laboren en actividades profesionales para las cuales se han formado”.
El rector sostuvo que durante años, la universidad no fue reconocida por el sector productivo, y la industria del país dependió de la importación de tecnología para la solución de sus necesidades.
“Generalmente (recurrieron a), tecnología de segunda y tercera generaciones, ya utilizada y descartada en el primer mundo y, por tanto, no necesitaron de la universidad para mejorar las cadenas productivas. Ahora la industria del país se está dando cuenta de que no puede seguir en el mismo camino de hace 20 años y que debemos desarrollar nuestra propia tecnología. Están viendo que lo que se ha estado llevando a cabo en las universidades puede ser una fuente útil de conocimiento y desarrollo”.
Por su parte, el presidente nacional de la Canacintra, Miguel Marón Manzur, negó que la industria prefiera contratar a egresados de universidades privadas antes que jóvenes provenientes de centros de educación pública, pero consideró que los planes de estudios superiores deben empezar a adaptarse a las necesidades del sector empresarial.
“Cuando hay demanda de las empresas, lo que importa no es la universidad, sino el estudiante. Lo que ahora requerimos es tener contacto con las universidades para que los planes de estudios se vayan adecuando a las verdaderas necesidades del país y de la industria nacional”.