■ El INBA confirma información de La Jornada sobre la rehabilitación del palacio
Bellas Artes no dejará de funcionar mientras le hacen cirugía mayor
■ No se hará trabajo alguno hasta que no se discuta el proyecto con los grupos artísticos, asegura el instituto
■ Museos, salas, librería y café restaurante del recinto permanecerán abiertos
Ampliar la imagen La restauración más reciente en la estructura del Palacio de Bellas Artes se realizó en 2004. En la imagen, labores de limpieza del águila emplazada en la cúpula, ese año, con motivo de la conmemoración de siete décadas del máximo recinto cultural del país Foto: José Carlo González
El cierre del Palacio de Bellas Artes para someterlo a una “cirugía mayor” será parcial. Los trabajos estarán centrados en la renovación de las instalaciones técnicas del teatro y de dos salas del museo, confirmó ayer a La Jornada Ricardo Calderón, subdirector del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).
En noviembre de 2007 este diario dio a conocer que el máximo recinto cultural del país sería sometido a un remozamiento a partir del segundo semestre de 2008.
Al respecto, el funcionario se comprometió a que en un plazo no mayor de dos semanas se darán a conocer los detalles del proyecto de rehabilitación y su costo.
El programa de obra “ha tomado más tiempo del que habíamos previsto, pues son estudios que se deben hacer con rigor y detenimiento, para tener la certeza del estado en el que se encuentra el recinto y de lo que queremos hacer.
“Hemos empezado con un diagnóstico realizado por el Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el cual arroja qué parte del equipo funciona y cuál no. A partir de ahí hemos desarrollado una serie de proyectos para mejorar la acústica de la sala principal, la cual tiene deficiencias, así como para modernizar la mecánica teatral y la iluminación.”
Remplazo de equipos antiguos
“En particular –prosiguió Ricardo Calderón– queremos brindar al recinto, a los ejecutantes y al público las mayores condiciones de seguridad. No quiere decir que el palacio sea un lugar inseguro, pues constantemente tenemos revisiones de las instalaciones, pero estamos hablando de un recinto que el próximo año cumplirá 75 de estar abierto y más de 100 de haberse iniciado su construcción, muchos de los equipos son así de antiguos; por ejemplo, la mecánica teatral, que fue vanguardista en su época, se puso en funcionamiento en 1934.”
Reiteró que “estamos en las vísperas de tener un panorama más completo de cuáles serían las acciones a seguir para las mejoras al foro del Palacio de Bellas Artes, para saber cuándo iniciarlas, cuánto tiempo nos llevaría y cuál sería su costo. Ofrezco informarlo en una o dos semanas, porque no estamos manejando información secreta ni ocultando nada, sencillamente no contamos con los datos.”
El subdirector del INBA también aseguró que no se llevará a cabo ningún trabajo hasta que no se discuta el proyecto con los diferentes grupos artísticos que tienen su sede el palacio, “pues ellos son los pilares fundamentales de la vida del recinto. No hemos tomado ni tomaremos decisiones al margen de ellos. Estamos en el mismo equipo.”
Reiteró que “nunca se va a cerrar el Palacio de Bellas Artes, pues se trata de un espacio cultural fundamental en la vida del país. Además de su sala de espectáculos, cuenta con dos museos, las salas Adamo Boari y Manuel M. Ponce, así como el servicio de café restaurante y de librería.
“Trabajamos también en un plan maestro de largo plazo para que el recinto esté en las mejores condiciones de conservación, arquitectónica, decoración, seguridad, etcétera. Esto tendría que abarcar, probablemente, hasta una próxima administración.”
Por otra parte, Ricardo Calderón reveló que “se han hecho sondeos con espacios artísticos que fueran susceptibles de recibir a los grupos, en la eventualidad del cierre parcial del palacio, para tener alternativas para las funciones. Hemos estado en contacto con la UNAM, con el gobierno de la ciudad de México y con el Instituto Mexicano del Seguro Social, pero no está tomada ninguna decisión porque no tenemos nada amarrado.
“En este momento, y por lo menos hasta nuestra pausa natural por el periodo vacacional de verano, tenemos nuestras actividades de siempre.
“Antes de que se vayan de descanso los grupos artísticos tendremos un panorama más claro y se verá con ellos las decisiones que vamos a tomar.
“Tenemos un programa de exposiciones por lo que resta de este año y del próximo. En cuanto al museo ya hicimos una remodelación importante antes de presentar la muestra dedicada a Frida Kahlo.
“Nos quedaron pendientes las salas Nacional y Diego Rivera. Entre agosto y septiembre, probablemente, cerraremos esos dos únicos espacios para ponerlos al día en cuestión de seguridad e iluminación. Pero todo lo demás seguirá abierto: los servicios, el acceso a los murales, las otras salas.”
El funcionario reconoció que el teatro del Palacio de Bellas Artes cuenta con algunas instalaciones obsoletas, si bien en una gran parte es funcional, pero se propondrá instalar tecnología de última generación; “será como una cirugía de corazón, para colocar un bypass, que si bien no será visible para el público, sí se percibirá, los espectáculos se verán y escucharán mejor”.
En cuanto a presupuesto descartó que por el momento se vaya a requerir una ampliación, “el dinero ya está, del asignado, precisamente del rubro que anualmente se destina para obras. Hasta no conocer el plan maestro no sabremos si para el próximo ejercicio presupuestal requeriremos recursos extras”, concluyó.