Hallyday, leyenda del rock francés, cumple 65 años
París, 12 de junio. Johnny Hallyday es tan parte de Francia como la Torre Eiffel o la baguette. Tres generaciones de franceses han festejado e idolatrado a este cantante de rock y música ligera.
Entre ellos se encuentran también muchos políticos de renombre, como el jefe de Estado de Francia, Nicolas Sarkozy, quien celebró junto con Hallyday su triunfo electoral hace un año en los Campos Elíseos. El ex presidente Jacques Chirac, por ejemplo, solía cenar con el cantante.
Johnny Hallyday, que cumplirá 65 años el próximo domingo, personifica como ningún otro la generación de la posguerra. Él habla a los franceses con el alma a través de sus canciones, según el diario francés Le Monde.
Cuando Hallyday anunció en diciembre por televisión que saldría por última vez de gira a finales de mayo de 2009 el desconcierto en un principio fue grande. Pero nadie quiere creerle. “No quiero aparecer sobre el escenario como un viejo rockero. Siento mucho respeto por el público”, dijo la leyenda del rock con ojos color azul metálico y cara de piel estirada por liftings, como la de un jovencillo.
Símbolo de la generación ye-yé
Su carrera le viene desde la cuna: a la temprana edad de cinco años, Jean-Philippe Smet ya salía de gira.
Su padre fue actor y bailarín belga; abandonó a su familia cuando Hallyday tenía ocho meses. Como la madre estaba obligada a trabajar y no tenía tiempo para él creció con su hermana, quien a partir de 1944 salió de gira de baile con sus hijas, mientras Johnny tenía apenas un año de edad. El grupo se llamaba The Hallydays.
Después de más de 15 años de vida de juglar, Hallyday volvió de nuevo a París. Allí adoptó la nacionalidad francesa y su nombre artístico. El hasta entonces cantante esporádico y encargado de rellenar los intermedios en clubes musicales alrededor de la Place Pigalle, se convirtió de la noche a la mañana en símbolo de la “generación yeyé”. Sus modelos eran el rocanrol de Estados Unidos y Elvis Presley.
Hallyday nunca ha realizado una copia del rock estadunidense. Ha desarrollado su propio estilo y lo ha renovado constantemente a partir de la integración de todas las tendecias musicales de cada momento.
¿Por qué los franceses idolatran a este viejo rockero que se tiñe el pelo? “Es como un tocadiscos. Adapta su música a los tiempos”, escribió la revista francesa Le point.