■ Causa molestia entre jueces el reproche de Calderón, afirma José Ángel Mattar Oliva

La liberación anticipada de delincuentes, culpa de una iniciativa de Fox: magistrado

■ Indica que los impartidores de justicia sólo acatan la ley promulgada en el sexenio pasado

Alfredo Méndez

En respuesta al reproche que lanzó el presidente Felipe Calderón en contra de algunos juzgadores mexicanos, a los que acusó de fomentar la impunidad por permitir la libertad anticipada de delincuentes que son detenidos por policías y militares en medio de la llamada guerra contra el narcotráfico, el magistrado federal José Ángel Mattar Oliva salió al paso de esa crítica presidencial, y en entrevista con La Jornada aseguró: “El problema no es de los jueces; es del Poder Legislativo y, en todo caso, de la iniciativa del anterior presidente panista (Vicente Fox), que entró en vigor en mayo de 2004 y con la cual se reformó el artículo 25 del Código Penal Federal (CPF)”.

La exposición de motivos del decreto presidencial por el que se modificó dicha norma refiere que el objetivo de la iniciativa presidencial fue que se abatiera la sobrepoblación de las cárceles del país, puesto que en menos de 20 años se había triplicado la población penitenciaria.

“La propuesta iba encaminada a flexibilizar la ley penal para que salieran más rápido los delincuentes, y por ello ahora estamos obligados (los jueces) a que se compurgen las penas (de los sentenciados) de manera simultánea y no sucesiva”, precisó Mattar, quien hizo historia en julio de 2006, cuando concedió la primera orden de aprehensión por genocidio librada en el país en contra del ex presidente Luis Echeverría Álvarez.

La polémica entre el presidente Felipe Calderón y los juzgadores inició en mayo pasado, luego que el Presidente de la República, hizo un llamado al Consejo de la Judicatura “para que revise, precisamente, la actuación de sus jueces que están poniendo en la calle a criminales que son, incluso, confesos”.

El reproche calderonista a la actuación de los jueces obedeció además al hecho de que el presunto asesino del jefe de la Policía Federal Preventiva (PFP), Édgar Millán, había salido recientemente de prisión, luego de que un juez del fuero común ordenó su libertad anticipada.

En este contexto, el pasado 13 de mayo, durante una conferencia de prensa en Los Pinos, Felipe Calderón dijo que “tiene que haber una transformación en la administración de justicia, y esta tarea también es un llamado para los jueces y para el Poder Judicial que tiene también que cerrarle el paso a la impunidad que se da, precisamente, en la liberación de muchos delincuentes que el Poder Ejecutivo, la Procuraduría General de la República, el Ejército o la Secretaría de Seguridad Pública ponen en la cárcel”.

Según el magistrado José Ángel Mattar Oliva, esta critica presidencial ha causado la molestia de varios impartidores de justicia, principalmente del fuero común, quienes consideran “injusto” el hecho de que el titular del Ejecutivo federal los exhiba ante la opinión pública como “jueces que fomentan la impunidad”, sólo porque “estamos obligados a sujetarnos” a una modificación de las leyes penales propuesta por un ex presidente del mismo partido que Calderón.

-¿Quiere decir, magistrado, que el Presidente no conoce bien las leyes mexicanas?

-No se si sea una cuestión política; el Presidente por ser abogado y egresado de la Escuela Libre de Derecho debe conocer bien las leyes. La cuestión es que aquí está esta ley (artículo 25 del CPF) y no se debe de ignorar.

-Entonces, no es culpa de los jueces el que salgan rápido los delincuentes?

-Los jueces no tienen ninguna responsabilidad en liberar a la gente que conforme a derecho no debe estar en prisión; ellos no tienen la responsabilidad de darles a los inculpados un grado de peligrosidad o de culpabilidad menor, y menos culpa tienen de que se compurguen las penas de los reos de manera simultánea y no sucesiva. Ese es problema de la ley que está en esos términos, así fue reformada en 2004, y a los jueces sólo nos corresponde aplicarla.

“Si él (Calderón) no quiere que la gente salga rápido de las cárceles, pues que modifique la ley penal, pero no es prudente que esté exhibiendo a los jueces del fuero común en la televisión como los jueces que liberan a la mayoría de los delincuentes, cuando los juzgadores sólo aplican lo que la ley nos señala”.