■ El Estado no puede investigar, ya que es sospechoso: activistas
“Inconcebible”, que el actual gobierno niegue desapariciones forzadas; van 6
Ampliar la imagen Defensores de los derechos humanos cubrieron las rejas que rodean la Secretaría de Gobernación de mantas con demandas de poner fin a las desapariciones forzadas durante la presente administración Foto: Francisco Olvera
En el tiempo del gobierno de Felipe Calderón se han reportado al menos seis casos de desapariciones forzadas, por lo que “es inconcebible” que el gobierno federal insista en que no hay desaparecidos en el país, señalaron diversos activistas y familiares de éstos.
Al realizar un mitin en la sede de la Secretaría de Gobernación, defensores de derechos humanos y familiares de algunos desaparecidos exigieron la presentación con vida de Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Alberto Cruz Sánchez, integrantes del Ejército Popular Revolucionario (EPR); de Francisco Paredes Ruiz, de la Fundación Diego Lucero; de las hermanas Daniela y Virginia Ortiz Ramírez, indígenas triquis de Oaxaca; y que no quede impune el crimen de Lauro Jiménez, activista oaxaqueño de la Unión de Campesinos Pobres, quien estuvo tres meses desaparecido hasta que encontraron su cadáver en un paraje de ese estado.
Nadín Reyes y Janahuy Paredes, hijas de Edmundo y Francisco, respectivamente, recordaron que de acuerdo a los lineamientos internacionales, la desaparición forzada es un crimen de lesa humanidad y en los casos de sus padres el Estado mexicano ha asumido una postura de “no pasa nada” por lo que es “culpable” de esos delitos, aseguraron.
Figuras negras de cartón que representaban figuras humanas amordazadas, atadas, torturadas y desaparecidas fueron colocadas sobre las vallas que cercan el palacio de Covián cuando las autoridades saben que habrá manifestaciones.
A la protesta –que se vio interrumpida por integrantes de los 400 pueblos que también acudieron a Bucareli a manifestarse— se sumaron el Comité Cerezo, la organización H.I.J.O.S., estudiantes universitarios y familiares de los desaparecidos.
Escrita sobre mantas y cartones expresaron su demanda de “los queremos con vida”. Acusaron a Felipe Calderón de “criminal y represor” y al Estado mexicano lo señalaron como “responsable de las desapariciones forzadas”.
Nadín Reyes informó que los familiares de los desaparecidos pretenden realizar una campaña de información y denuncia de estos hechos por América Latina, además de reunirse con víctimas de este delito durante las dictaduras en la región.
Criticó que sea el propio Estado el que investigue la desaparición de su padre y el resto de los reclamados, ya que “no creemos que puedan juzgarse a sí mismos quienes son acusados”. En tanto, Janahuy afirmó que la PGR tiene “estancada” desde hace varios meses las investigaciones sobre la desaparición de su padre.
Las desapariciones de estas seis personas se dieron así: el 25 de mayo de 2007 en Oaxaca, las de Reyes Amaya y Cruz Sánchez; el 26 de septiembre de ese mismo año fue Paredes; hace 11 meses desaparecieron las dos indígenas triquis y el 30 de diciembre pasado se dejó de saber de Juárez, hasta que sus restos fueron hallados el 3 de marzo de 2008 en el paraje El Potrillo.