■ Afirma que no quedará impune el caso de los cubanos rescatados por un comando
Cero tolerancia a servidores involucrados con redes de tráfico de personas: Mouriño
■ Se desconoce el paradero de unos 20 indocumentados; anuncia nuevas reglas para el INM
Ampliar la imagen Autoridades migratorias apresaron en 2007 a mil 359 cubanos indocumentados. En la foto, una de las caribeñas capturdas la semana pasada Foto: AP
El secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, dijo que “no habrá tolerancia” con los empleados públicos que participen en las redes de tráfico de personas y aseguró que el reciente caso de cubanos indocumentados no quedará impune.
El gobierno federal investiga el grado de colusión de agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) en los hechos de la semana pasada, cuando personas armadas interceptaron un autobús, en el cual personal del INM custodiaba el traslado de un grupo de indocumentados (33 cubanos y cuatro centroamericanos) a una estación migratoria de Chiapas.
La Procuraduría General de la República (PGR) analiza la dimensión de la red de corrupción que ha permitido sucesos como el referido, el cual fue reconocido ya como parte de una mafia de tráfico de personas.
“A raíz de estas detenciones, seguramente podremos ir avanzando en la averiguación y reconocer la estructura misma de la red de tráfico de personas y el nivel de penetración que tenga entre las autoridades migratorias”, declaró el secretario Mouriño Terrazo.
Aseguró también que hasta ayer se desconocía el paradero de casi una veintena de indocumentados, luego que las autoridades de Estados Unidos confirmaron que en su territorio ya se hallan 18 cubanos, 17 de los cuales fueron puestos en libertad, con derecho a regularizar su estancia, con base en la denominada Ley del Ajuste Cubano.
Tras lo hechos, el responsable de la política interna de México anunció nuevas “medidas firmes al interior del INM” para garantizar que este organismo cumpla con su responsabilidad “y que hechos lamentables como el ocurrido no se vuelvan a repetir”.
En tanto, la coordinadora general de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), Katya Somohano, dijo que actualmente la dependencia a su cargo “no tiene ninguna solicitud (de refugio) de nacionales cubanos”.
Durante 2007, el Instituto Nacional de Migración apresó a mil 359 cubanos (2.7 por ciento del total de los extranjeros retenidos en estaciones migratorias) y de enero a abril de este año el registro ya se ubica en 994 indocumentados de esa nacionalidad, esto es, 5.9 por ciento del total de detenidos.
Sin embargo, el gobierno de México ha expedido en los últimos años miles de “oficios de salida” para que los cubanos que llegan al país sin documentos abandonen México, para que en su trayecto ninguna autoridad se los impida.
De esta forma el grupo de cubanos indocumentados en referencia logró llegar a Estados Unidos, de acuerdo con las primeras investigaciones.
El secretario Mouriño dijo ayer durante la ceremonia del Día Mundial del Refugiado que los servidores públicos que trabajan con migrantes deben conducirse bajo los principios de la no discriminación, el respeto irrestricto a los derechos humanos y al estado de derecho.
“No habrá tolerancia con quienes con su complicidad manchan no sólo a las instituciones y al gobierno para el que trabajan, sino el prestigio y la estatura moral de México frente a los países expulsores de migrantes y frente al resto del mundo”, dijo.
Los agentes y el personal de migración – agregó— son la cara con la que México recibe al mundo.
“Ese rostro tiene que ser amable, honesto y amigable. Tiene que ser la cara con la que queremos que siempre se recuerde a México”, concluyó el encargado de la política interna de México.