■ La federación germana quiere renovarle contrato más allá de 2010
Ya no hay presión, dijo Joachim Low
Tenero, Suiza, 26 de junio. Tras la “loca batalla” de la semifinal ante Turquía, Alemania encara la final de la Eurocopa con relajación y la sensación del deber cumplido.
“Ahora ya no hay presión”, dijo el técnico gemano, Joachim Low. “Llegamos a la final con una alegría increíble”, señaló, y tiene clara la meta: el título. Sería el cuarto tras los conquistados en 1972, 1980 y 1996.
Low, a quien la federación alemana busca ofrecerle la renovación más allá del Mundial 2010, destacó “la voluntad y mentalidad” que su equipo ante los turcos, durante el duelo que calificó de “loca batalla con final dramático”.
“Ahora está claro que la meta es llevar el título a Alemania”, dijo el defensa Phillip Lahm, autor del gol del triunfo ante los turcos. “Fue con seguridad mi gol más importante”, señaló.
El equipo germano vio relajado el duelo Rusia-España. “Da igual lo que venga, queremos ganar la final”, señaló Lukas Podolski.
“Los jugadores saben de qué se trata, tanto para ellos mismos como para la gente de Alemania”, comentó el presidente de la federación de futbol de ese país, Theo Zwanziger, quien invito al ex seleccionador Juergen Klinsmann para que esté en la final.
Luego de un recibimiento con fuegos artificiales en el cuartel general de Ascona, el pasado miércoles, los jugadores celebraron el triunfo vaciando unos cuantos vasos durante la noche de verano a las orillas del Lago Maggiore.
“Debemos aumentar nuestro rendimiento”, alertó el capitán Michael Ballack, quien hace seis años se perdió el partido por el título del Mundial 2002, por una tarjeta amarilla.