■ Calderón y Hu Jintao acuerdan mejorar la relación bilateral

Refuerzan México y China el intercambio comercial

■ González Barrera y Servitje buscan más negocios en el país asiático

Claudia Herrera Beltrán

Pekín, 10 de julio. La primera visita oficial del presidente Felipe Calderón Hinojosa a China comenzó con la firma de acuerdos que permitirán la exportación de carne de cerdo de México a este país y un tratado de extradición.

El mandatario mexicano y su comitiva fueron recibidos por el presidente Hu Jintao, en una ceremonia celebrada en el Gran Palacio del Pueblo, lugar donde también se realizan las sesiones plenarias del Congreso Popular Nacional.

En el salón central la guardia de honor, integrada por elementos de la marina y del ejército, rindieron honores a ambos presidentes y una banda de música interpretó los himnos nacionales de los dos países.

La comitiva de México estuvo integrada por el secretario de Economía, Eduardo Sojo; la canciller Patricia Espinosa, legisladores, y los empresarios Roberto González Barrera, dueño de Grupo Maseca, y Daniel Servitje, presidente de Bimbo, que tienen importantes inversiones en China.

Después de la recepción, los presidentes caminaron al salón Anhui, donde tuvieron una reunión bilateral con sus respectivas comitivas. Al inicio se dio un delicado incidente, porque elementos de seguridad del Palacio del Pueblo sacaron a reporteros mexicanos a empujones y golpes.

Mientras el presidente Hu Jintao daba la bienvenida a su invitado, en los costados del salón los guardias aventaron y jalaron a los periodistas, que debieron salir.

De acuerdo con el coordinador de comunicación social de Los Pinos, Maximiliano Cortázar, autoridades del gobierno chino rompieron un acuerdo sobre la presencia de los reporteros en dicho salón, aunque posteriormente corrigió esta versión y dijo que habían procedido como lo hacen en otras visitas en cuanto a permitir que la prensa estuviera sólo unos minutos en el lugar. Por eso consideró que esta situación fue producto de una confusión.

Sin embargo, un funcionario de la cancillería china de apellido Quian indicó que el gobierno de ese país acordó con sus homólogos de México que la prensa sólo podía permanecer dos o tres minutos en el lugar y que después se debía retirar.

Este hecho provocó que por algunos minutos funcionarios de la coordinación de comunicación social de la Presidencia de la República discutieran con sus homólogos de la administración china, sobre todo porque algunos periodistas resultaron golpeados.

Antes, Calderón aseguró que su estancia de tres días en China contribuirá a impulsar los vínculos entre las dos naciones y reiteró sus condolencias por la tragedia ocurrida en Sicuani, donde miles de personas murieron a causa de un terremoto.

Materias de los tratados

Después ambos presidentes atestiguaron la suscripción de cuatro acuerdos, uno que garantiza la promoción y protección de las inversiones entre México y China, y otro que es un protocolo de inspección, cuarentena y sanidad veterinaria para la importación y exportación de carne de cerdo que involucra a la Secretaría de Agricultura mexicana y a la administración general de supervisión de calidad de China.

También firmaron un acuerdo de cooperación técnica sobre asistencia y bienestar social entre la Secretaría de Desarrollo Social mexicana y el Ministerio de Asuntos Civiles de China, así como un programa de combate a la pobreza.

El presidente mexicano asistió posteriormente a un almuerzo que le ofreció su homólogo y, al cierre de esta edición, estaba por iniciar un recorrido por la Ciudad Prohibida.