■ Desarrolla modelo que reproduce la energía de la molécula de ese elemento químico
Premian a Raúl Pérez Enríquez por estudio sobre el hidrógeno
■ El investigador de la Universidad de Sonora recibió medalla de oro de la Asociación Santilli-Galilei de la Verdad Científica, de GB
■ En la industria petrolera debe prevalecer el interés público, dice
El profesor Raúl Pérez Enríquez, del departamento de Física de la Universidad de Sonora, recibió la medalla de oro en la categoría de Química Hadrónica, otorgada por la Asociación Santilli-Galilei de la Verdad Científica, por haber encontrado “un modelo que reproduce la energía de la molécula del hidrógeno”.
De regreso de su viaje a Gran Bretaña, donde recibió el premio, Pérez Enríquez explicó en entrevista que en buena medida su interés por entender el hidrógeno está en el marco de su uso como energético. Debido al “agotamiento de los recursos petroleros” y a que “quemar hidrocarburos es irracional, tenemos que generar nuevas formas de energía. Una de las posibilidades de energéticos del futuro es el hidrógeno”.
Pérez Enríquez es “partidario de que la industria petrolera debe seguir siendo de la nación. Permitir el acceso a la iniciativa privada, con las experiencias que ha habido en el pasado, no augura un buen futuro para la industria, ni para que México recupere o utilice los hidrocarburos para el bien del país. Tiene que prevalecer el interés público sobre el privado”.
De no buscarse alternativas, “nos quedaremos embargados”
Enfatizó “la necesidad de fortalecer nuestra industria (petrolera) y la investigación, tanto en hidrocarburos como en otras fuentes alternas de energía, como el hidrógeno. Si no se utilizan los recursos de los hidrocarburos para buscar los nuevos energéticos del futuro, nos quedamos embargados. Las iniciativas de ley presentadas por Calderón omiten todo esto y se van por la cuestión del negocio y de que sea para la iniciativa privada, y no promueven el desarrollo científico y tecnológico de los nuevos energéticos que van a sustituir a los hidrocarburos y que evitarían seguir quemando los hidrocarburos. Toda esa fuente quedaría en riesgo si entregamos los hidrocarburos a las empresas trasnacionales”.
Respecto del uso de los hidrocarburos, abundó: “Su aprovechamiento (consiste en) volverlos a deshacer: a la naturaleza le tomó millones de años integrar esas cadenas y estructuras complejas (como) para que las desarmemos.
“Quemar los hidrocarburos es un desperdicio: pueden ser utilizados para otros fines, como recursos para otras finalidades, como es la industria petroquímica.”
El profesor participó en uno de los foros de la Convención Nacional Democrática: “Me interesa el desarrollo de mi país, y lo que ha sucedido a raíz del fraude”. En la CND ofreció una ponencia en la que habló de la necesidad de promover la investigación sobre el hidrógeno.
Actualmente, éste se utiliza como fuente de energía, pero “hay ciertas dificultades tecnológicas, el almacenamiento es costoso”.
Durante su maestría, Raúl Pérez Enríquez buscó soluciones al problema del almacenamiento del hidrógeno (“elemento químicamente muy activo y que reacciona explosivamente con el oxígeno”); en particular, estudió los nanotubos de carbono.
La investigación del hidrógeno lo llevó a “que la molécula como tal debía ser estudiada más a fondo”. En este tema enfocó su doctorado.
“Inicié la investigación buscando estudios más recientes y en ese camino encontré el modelo Santilli-Shillady: proponían una solución nueva en el marco de una nueva mecánica: la hadrónica”, dijo Raúl Pérez Enríquez.
Electrones que interactúan
El científico explicó, a grandes rasgos, el modelo de tres cuerpos de Santilli-Shillady: “Los electrones que forman la molécula de hidrógeno no son individuales, sino que interactúan entre sí y forman una cuasipartícula, de manera que lo que permite mantener unidos a los núcleos en la molécula es esa interacción fuerte que surge entre los electrones. Se forma el isoelectronio. Ése es el modelo de tres cuerpos que encontré atractivo. Los que lo habían trabajado encontraron que había discrepancias entre las energías de la molécula de hidrógeno y el modelo”. O sea, fallaba el modelo.
“Obtuvimos la energía de toda la curva de la molécula de hidrógeno, que no se había encontrado más que por métodos numéricos”, explicó el científico. Lo hallaron de modo “más directo, más sencillo, analíticamente”.
Llegaron a “un modelo de cómo está estructurada la molécula de hidrógeno. Es una aproximación que permite calcular la energía que se observa del estado de la molécula del hidrógeno”.
El profesor enfatizó que el premio no es sólo para él: “También es para mi tutor y asesor de doctorado, el doctor José Luis Marín Flores, quien falleció el día que iban a ir a festejar la notificación del premio”. Marín “jugó un papel muy importante, no sólo por orientarme sino porque discutimos el modelo y cómo aplicarlo y los resultados previos que había desarrollado (sistemas confinados) me sirvieron”.