■ De apenas 20 años, sorprendió en Bélgica y Alemania durante un concurso internacional
Joven chiapaneco renueva la tradición en la música de marimba
■ Los objetivos de la innovación, salir de lo usual; técnica y musicalmente es muy difícil, admite Eduardo González
■ Dirige el Grupo Concierto del Soconusco
Tuxtla Gutiérrez, Chis., 23 de julio. De apenas 20 años de edad, Eduardo González Franco, originario de Tapachula, se ha convertido en todo un personaje luego de que en 2007 participó en el Concurso Internacional de Marimbistas en Bélgica, causó sensación en Alemania y puso de moda tocar el singular instrumento, en tiempos en que los jóvenes sueñan ser cantantes de música pop o tocar en una banda de rocanrol.
El marimbista inició su acercamiento a la marimba y al piano cuando tenía seis años de edad; en 1997 comenzó de manera formal sus estudios en ambos instrumentos.
Actualmente es director del grupo de marimba Concierto del Soconusco, con el que cada año participa en concursos estatales de marimba.
González Franco tomó clases con prestigiados marimbistas, como Ludwig Albert (Bélgica) y Ney Rosauro (Brasil). Fue ganador del Concurso Nacional de Marimbistas en la categoría de solista, en 2006.
Un año después recibió la invitación para participar en el Concurso Internacional de Marimba en Bélgica, donde tuvo sonado éxito, al grado de que, apenas bajó del escenario, recibió una oferta para dar otros conciertos en ese mismo país y en Alemania, donde fue ovacionado.
Su triunfo tiene una explicación: Eduardo innovó la forma tradicional de tocar la marimba. “Es común ver cuatro y hasta cinco personas tocando; yo busqué y hallé la forma de ser solista, y me dio resultado”.
Sólo en Japón y Alemania, a mitad de los años 90, se llegó a ver que un músico tocara solo la marimba. “En Chiapas, México y otros lados de América Latina fue una novedad”, comentó en declaraciones difundidas por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes .
Como solista, agregó, el reto es implementar todas las voces que requiere el instrumento, así como la melodía y el acompañamiento.
La nueva modalidad que impuso tiene un objetivo: “salir de lo tradicional, tocar para una sola voz e implementar la coordinación de manos, porque técnica y musicalmente es muy difícil”, explicó.
El joven marimbista, quien actualmente estudia la licenciatura en música, con el perfil de instrumentista y la especialidad en marimba, agradeció el apoyo del Consejo Estatal de Cultura para el Festival Internacional de Marimba, el cual hace posible dar a conocer la tradición y riqueza musical de marimba de Chiapas.
“En muchas regiones y municipios del estado es todo un ritual que los niños desde pequeños comiencen a relacionarse con la marimba. Es una tradición que no debemos perder, porque forma parte de nuestra vida diaria. Hago una invitación a que conozcan las innovaciones que estamos llevando a cabo.”