■ También hubo malestar en terminales de Baja California Sur, Sinaloa y Sonora
Trifulca en el aeropuerto de la ciudad de México por suspensión de Aerocalifornia
■ Pasajeros quedaron varados; exigen cumplimiento de los servicios
■ Canaero lamenta la situación por el encarecimiento de la turbosina
Ampliar la imagen Pasajeros en el aeropuerto de la ciudad de México discuten con el gerente de Aerocalifornia, Noé Lizárraga, luego de que la línea fuera suspendida por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes por adeudar pagos por el uso del espacio aéreo Foto: José Carlo González
Pasajeros varados, gritos de protesta y hasta engaños fueron la constante este jueves en aeropuertos de la ciudad de México, Baja California Sur, Sinaloa y Sonora tras la cancelación de vuelos de la compañía Aerocalifornia por supuestos adeudos fiscales.
En el aeropuerto internacional Benito Juárez de la ciudad de México los pasajeros afectados rechazaron las “explicaciones nebulosas” del personal de Aerocalifornia y exigieron el cumplimiento de los servicios contratados.
Docenas de personas que tenían comprados boletos para salir del Distrito Federal, la mayoría en plan de vacaciones, llegaron a la Terminal 1 y se registraron ante los mostradores de la citada aerolínea, pero se encontraron con que no podían pasar a las salas de última espera “porque, según la línea, se están tomando precauciones ante el mal clima que priva en la mayor parte del país”, dijo, muy molesto, Miguel Angel Zacarías, que no pudo viajar a Hermosillo, vía Monterrey, en el vuelo 422, junto con dos de sus hijos.
Empleados de la compañía trataron de abandonar los mostradores, pero la acción fue impedida con fuerza por unos cien pasajeros. Intentaron dar una serie de explicaciones que, lejos de calmar los ánimos, aumentó el malestar de los usuarios. La intervención de efectivos de las policías Auxiliar y de la Federal Preventiva evitó agresiones físicas.
Aerocalifornia se vio obligada a suspender sus vuelos por segunda ocasión en dos años debido a que no ha comprobado el pago de derechos por el uso del espacio aéreo nacional. La notificación de suspensión de vuelos fue hecha ayer por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes para que entrara en vigor la mañana del jueves.
En el aeropuerto internacional Manuel Márquez de León de La Paz, Baja California Sur, los clientes de Aerocalifornia fueron notificados de que se suspendían los vuelos mientras documentaban su equipaje o esperaban el llamado para abordar. La reacción fue de molestia y hubo quejas por el poco profesionalismo de la aerolínea.
Una situación similar se presentó en los aeropuertos de Culiacán y Mazatlán, donde personal de Aerocalifornia intentó convencer a los cientos de pasajeros varados de que “el problema se solucionaría en 30 minutos”.
Incluso algunos empleados aseguraron que una aeronave de la compañía reportaba un retraso en su trayecto de Tijuana al aeropuerto de Mazatlán.
El personal de Aerocalifornia asentado en el aeropuerto internacional de Hermosillo se aventuró a explicar a los clientes que, a pesar de lo publicado en diarios locales y nacionales, la aerolínea seguiría en operaciones.
“Unos minutos antes de que nos tocara pasar a la puerta de abordaje, nos dicen que se suspendieron las operaciones”, dijo Sandra Hernández, una de las pasajeras afectadas.
Personal de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en los aeropuertos pidió a los pasajeros que esperaran la devolución del pago de los boletos y que, de no ser así, hoy se iniciaría una demanda civil colectiva. Otros inspectores no pudieron siquiera platicar con representantes de Aerocalifornia en mostradores, como sucedió en La Paz.
Por su parte, Jorge Luis Moya, vicepresidente de la Cámara Nacional del Aerotransporte (Canaero), lamentó que la crisis por los altos precios de la turbosina orille a las aerolíneas a que “dejen de hacer las funciones que les corresponde”, en detrimento de la seguridad.
El directivo dijo lo anterior al ser cuestionado sobre la suspensión de operaciones de AeroCalifornia y ExpressJet, y señaló que la Canaero ha manifestado su preocupación por que se cumplan todas las reglamentaciones vigentes.
En Tijuana, el menos 400 pasajeros quedaron varados en el aeropuerto internacional.
Desde el mediodía del jueves fueron suspendidos los vuelos a Mazatlán, Chihuahua, Culiacán y Durango, entre otros, lo que provocó indignación entre los viajeros que contaban con boletos y pases de abordar.