■ El colectivo La Nave Va busca rememorar esa gesta cubierta por las sombras
Anuncian acciones políticas y culturales para mostrar el lado festivo del movimiento del 68
La posibilidad de un movimientos social semejante al estudiantil de 1968 resulta totalmente factible hoy día dadas las condiciones del país, semejantes a las de hace 40 años: una extrema militarización en todo el territorio nacional, un clima policiaco en la capital de la República y falta de condiciones para el desarrollo de movimientos sociales.
Así lo alertaron ayer Luis Tomás Cervantes Cabeza de Vaca, Salvador Ruiz Villegas y Marcelino Perelló, ex líderes de ese movimiento estudiantil, quienes desde el colectivo La Nave Va se han propuesto terminar con esa visión predominante en la sociedad que relaciona y limita ese hecho social con el 2 de octubre y relega, de tal modo, el lado luminoso y festivo del mismo.
Para ese propósito anunciaron este viernes, en conferencia de prensa, que en los próximos meses desarrollarán una serie de acciones políticas y culturales, entre las que se consideran mesas redondas, foros, conferencias, ciclos de cine, publicaciones y debates públicos, actividades en las que se tiene prevista la participación de algunos de los más importantes ex líderes de los movimientos de París y Praga de 1968.
De igual manera, convocarán a la sociedad en su conjunto para que el 13 de septiembre próximo participe en una gran marcha y el 2 de octubre se guarde un minuto de silencio a escala nacional en memoria de los caídos.
Contra la visión lúgubre
El arranque formal de las conmemoraciones de las cuatro décadas del movimiento del 68 será este sábado, a las 13 horas, con la develación, en el Hemiclo a Juárez, de una placa alusiva al mitín que allí se realizó el 26 de julio de 1968, hecho que marcó el principio de ese acontecimiento histórico.
Fundado hace una década por ex líderes estudiantiles, activistas sociales y jóvenes universitarios, en el contexto de los 30 años del movimiento estudiantil, el colectivo La Nave Va tiene como objetivo “oponerse a la visión lúgubre, lastimera que algunos grupos, por simple facilidad o espíritu oportunista, han mantenido de lo que sucedió entonces”.
Tal es la explicación de Marcelino Perelló: “Queremos poner el acento en el lado luminoso del 68. Sostenemos que el 68 fue una gran fiesta.
“La parte trágica no provino de nosotros, sino del gobierno. Es imprescindible recordar el 2 de octubre, un día negro en nuestra historia, y su olvido no sólo no es permitido, sino que sería intolerable.
“Sin embargo, nos hemos enfrentado a la paradoja que el recuerdo del 2 de octubre ha oscurecido el recuerdo del movimiento mismo. Queremos, pues, con nuestra iniciativa transmitir a las jóvenes generaciones esa memoria festiva, esa herencia de lucha por la justicia y la libertad que caracterizó a la movilización de hace 40 años. Esa es la intención de La Nave Va, transmitir esa memoria que hoy se encuentra en las sombras.”