■ Es estrategia sucia de la FDA para proteger a agricultores de EU, dice Heladio Ramírez
“Juego del libre comercio malsano”, la campaña contra el chile jalapeño nacional
■ Pide al gobierno federal impedir que el país vecino ponga más barreras a productos mexicanos
Ampliar la imagen Aspecto de la planta de chiles La Costeña, en México, donde directivos y trabajadores pretenden demostrar que el chile jalapeño que se importa a Estados Unidos no está contaminado Foto: Guillermo Sologuren
El Frente Nacional de Legisladores del Sector Rural (FNLSR) sostuvo que el llamado de la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA) a los consumidores estadunidenses, para que eviten el consumo de chile jalapeño crudo mexicano, es una campaña sucia para proteger a sus agricultores.
“La presunta presencia de salmonela saintpaul, primero en el tomate saladet y ahora en el chile jalapeño, es un juego del libre comercio malsano que está provocando daños millonarios a los productores mexicanos y ante la cual el gobierno debe actuar con energía”, dijo Heladio Ramírez López, presidente del FNLSR.
La FDA aseguró en un comunicado que todas las muestras que han tomado en varias localidades –no especificó el número ni en qué lugares– “han tenido su origen en México”, por lo que ahora se intenta determinar si la salmonela procedió de una región o finca en particular.
La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) puntualizó que no ha concluido la investigación científica sobre al origen de la bacteria que realizan conjuntamente los expertos de ambos países. Exhortó a la FDA a mantener la cooperación y consultas bilaterales y abstenerse de hacer cualquier otro comentario público que involucre productos mexicanos con ese brote, hasta que hayan concluido los resultados de las investigaciones.
El gobierno mexicano, abundó la Sagarpa en un comunicado, espera que las autoridades sanitarias de Estados Unidos puedan presentar cuanto antes la evidencia científica que respalde cualquiera de sus pronunciamientos públicos conforme a la letra y espíritu de los tratados comerciales internacionales.
La producción nacional de chile jalapeño asciende a 720 mil toneladas, cuyo valor se estima en 2 mil millones de pesos y de continuar esta “incertidumbre” comercial, dijo César Fragoso, representante no gubernamental del sistema producto chile, se dañará la economía de 40 mil productores de Chihuahua, San Luis Potosí, Querétaro, Guanajuato y Michoacán.
Insistió en que las autoridades de Estados Unidos están utilizando el tema sanitario para detener las exportaciones del picante mexicano y favorecer a los productores de Las Cruces, Nuevo México, que están en temporada de cosecha.
Heladio Ramírez López, ex dirigente de la Confederación Nacional Campesina, comentó que la actitud de Estados Unidos “no es nueva; plantea las reglas, las distorsiona y luego las encamina de acuerdo con sus propios intereses; lleva a cabo un juego agraviante. Con el chile jalapeño están haciendo lo mismo que en el caso del tomate”.
El gobierno de México, agregó el también presidente de la Comisión de Desarrollo Rural del Senado, “tiene que poner un alto y demostrar que somos un país serio, responsable, que nuestros productores trabajan muy afanosamente para exportar productos de buena calidad e inocuos”.
Lo que disgusta, abundó, es que el gobierno nada hace para impedir que Estados Unidos sólo por sospechas imponga barreras infranqueables a los productos mexicanos, como lo hizo con las fresas, aguacate y otros productos del campo y del mar, como es el caso del atún.
El director del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) de Sagarpa, Enrique Sánchez Cruz, comentó que posiblemente este miércoles se tengan los resultados científicos de las muestras de chile jalapeño que se tomaron en algunas zonas del norte del país.