■ Proyecto del artista Héctor de Anda
Convierten empalizada en “nuevo mural del siglo XXI”
Las vallas de retacería de madera reciclada usadas en las construcciones urbanas llamaron la atención del artista Héctor de Anda, quien hace un mes se movilizó para convertir una tapia de la colonia Del Valle en una suerte de “nuevo mural del siglo XXI”, pues “tiene mucho que ver conmigo, me encantaría pintar sobre ella”.
De Anda no conocía a nadie en la constructora Central de Arquitectura, pero le atrajo la empalizada de la calle Gabriel Mancera 724, de 3.5 de altura y 24 metros de largo, dividida en dos segmentos.
Entonces, presentó su proyecto al director de la constructora, el arquitecto José Antonio Sánchez Ruiz, quien no lo pensó dos veces.
Del taller a la calle
El artista ya ha hecho intervenciones en espectaculares, mientras que lo fragmentado tiene mucho que ver con su obra, que suele ser reticulada, muy orgánica y emplea materiales reciclados.
Así fue como De Anda y sus tres colaboradores dejaron el taller para trabajar en la calle. El llamado Proyecto de Gabriel Mancera no requirió de bocetos, porque desde el comienzo el artista “sabía lo que quería”. Después de preparar la superficie de la valla hecha con tablas pequeñas, clavadas unas encima de otras, De Anda y su equipo la pintaron con acrílico, esmalte, resina e impermeabilizante.
Casi está listo el segmento derecho, sólo falta agregar algunos objetos encontrados, que tengan que ver con la calle.
El entrevistado lo ve como una crónica de “la ciudad, mi vida y el arte”. Una vez terminados los dos segmentos que integran el Proyecto de Gabriel Mancera, serán desmontados y guardados para mostrarlos “en un espacio cerrado donde los puedan ver muchas personas”.
A De Anda le gustaría exhibirlos en un museo, porque ya tuvo la experiencia con sus espectaculares de 4.5 de altura y 12 metros de largo: “Como los espacios son cerrados, al ver esa monumentalidad los visitantes quedaban impactados. Es una reacción parecida quizá de cuando las personas llegan a la ciudad de México y se encuentran con este gigantesco monstruo lleno de tantas cosas en todos los sentidos, desde la cultura hasta lo visual urbano, los edificios y las grandes masas de automóviles”.