■ Quiere ser odiado tras retirarse del futbol profesional
Cuauhtémoc Blanco va con todo para ser convocado al Tricolor
Ampliar la imagen Cuauhtémoc presentó un devedé con su trayectoria en el futbol Foto: Notimex
Cuauhtémoc Blanco aseguró que trabaja con todo para ser convocado a la selección nacional de futbol por el estratega Sven-Goran Eriksson, y sostuvo que sería mejor que no se incluyeran naturalizados en el Tricolor.
Al presentar un devedé con su historia y un cedé con 16 de sus canciones favoritas, el jugador se mostró bromista a ratos, como cuando respondió que le gustaría ser “odiado” cuando lo recordaran tras su retiro, al “igual que el América, que lo quieren o lo odian”.
Ante un auditorio abarrotado por una centena de representantes de medios de comunicación, Blanco dejó en claro que, “como cualquier jugador profesional,” le gustaría ser llamado al once nacional y participar en el Mundial de Sudáfrica, pero eso dependerá exclusivamente del estratega sueco.
Al hacer referencia al asunto de los naturalizados, dijo que no le importaba que se estableciera un tope en la selección, pero sí le gustaría que se les redujeran las plazas en los cuadros, y aprovechó para recomendar a Leandro Augusto, recientemente convocado al Tricolor que aproveche la oportunidad porque se “me hace que es un buen jugador y que puede aportar al equipo”.
Delante de una foto espectacular de la sección de las tribunas del estadio Azteca donde destacan las banderas de la porra Monumental, el Cuau recordó las dificultades del primer año en el club de Coapa, a donde llegaba en Metro o “pesero” acompañado del “güey” de Germán Villa, autor intelectual de la famosa forma en que festeja sus anotaciones, con una rodilla en el suelo, un brazo extendido y el otro doblado por el codo hacia atrás.
Entre luces de colores lamentó la situación que pasa su compadre Villa en el América, por lo que le recomendó echarle muchas ganas para demostrar su valía y que sea tomado en cuenta para alinear en el esquema del técnico Ramón Pelado Díaz, “porque no debe estar en la banca”.
El Cuau dijo desconocer la multa por 7 mil 500 dólares que le impuso la MLS y la suspensión de dos años por parte de la Copa, porque cuando se informó del asunto “yo venía viajando para acá”, aunque espera que todo se aclare una vez que hable con la gente del Chicago Fire, equipo donde milita.
Hizo caso omiso de la súplica de una reportera que le pedía que cantara, y prefirió referirse a su carácter que, sabe, es explosivo cuando lo provocan en el terreno de juego, aunque fuera es una persona con amigos con los que gusta compartir su tiempo libre.