■ Golpeados, países que vivían un auge por el crédito fácil; los problemas se extenderán más
La turbulencia financiera afecta aún a EU, Gran Bretaña y España: analistas
■ A un año de la debacle por las hipotecas, los bancos pierden 400 mil millones de dólares
Ampliar la imagen A partir de la crisis de las hipotecas los bancos comenzaron a recortar líneas de crédito Foto: Ap
Washington, 5 de agosto. Los efectos colaterales de la turbulencia del mercado financiero global, que ya lleva un año, han golpeado con más fuerza a los países que habían vivido un auge por el crédito fácil, primero y principal a Estados Unidos, pero también a Gran Bretaña y España. Gracias a los altos precios alimentarios y energéticos que están disminuyendo el gasto discrecional del consumidor e impidiendo a los bancos centrales responder a la crisis del crédito con menores tasas de interés de corto plazo, todo apunta a que los problemas se extenderán aún más.
“Ante la convulsión de los mercados financieros, nosotros vemos una creciente evidencia de que la economía global entra en un período significativo de desaceleración, y las mediciones más débiles aún están por venir”, precisó Steven Wieting, economista de Citigroup en Nueva York.
Un año después de que los mercados se paralizaran por las preocupaciones sobre las hipotecas subprime impagas, los bancos han sufrido pérdidas y amortizaciones por unos 400 mil millones de dólares. Eso reduce su capacidad de préstamo, disminuyendo el flujo de crédito a los consumidores y las compañías que motorizan la economía global.
Los consumidores estadunidenses que apostaron a la subida de los valores de las casas para financiar su retiro y reforzar sus ingresos disponibles ahora enfrentan la perspectiva de tener que ahorrar a la vieja usanza: gastar menos de lo que ganan.
Eso apunta a un periodo prolongado de crecimiento económico debajo de lo normal en Estados Unidos, y el daño colateral se propagaría a escala global. “En Asia, Europa y Latinoamérica, si bien el ritmo difiere, el crecimiento se está frenando virtualmente en todas partes”, estimó Richard Berner, economista de Morgan Stanley.
“Los culpables: los derrames de la desaceleración estadunidense, la mayor inflación, la reducción de los subsidios energéticos, el ajuste de las políticas monetarias y el ajuste de las condiciones financiera”, sostuvo.
Deutsche Bank estima que el recorte del crédito disminuirá el crecimiento económico estadunidense en casi 1.5 puntos porcentuales anuales hasta 2010. Un declive similar es probable en la zona euro.
Los efectos directos de la contracción del crédito son más evidentes en Estados Unidos. Las hipotecas subprime, otorgadas a los prestatarios con pobres historiales de crédito, virtualmente han desaparecido. Los bancos están recortando las líneas de crédito con garantía hipotecaria que ayudaron a financiar un auge del consumo que duró desde 2002 hasta 2006.
Los términos se han ajustado para una gran variedad de préstamos, desde aquellos destinados a las empresas pequeñas y grandes hasta la financiación de la construcción comercial. Incluso las ofertas de tarjetas de crédito se han moderado.
La Reserva Federal, el banco central estadunidense, sigue preocupada por la posibilidad de que se produzca un círculo vicioso, donde la lentitud del crédito bancario limite el crecimiento económico llevando a una reducción aún mayor de los préstamos.
Se contrajo la economía global por segundo mes consecutivo
La economía global se contrajo por segundo mes consecutivo en julio, ante una disminución en la producción tanto en las compañías manufactureras como de servicios, perjudicadas por una menor demanda y unos altos costos energéticos, mostró el martes un sondeo.
El Indice Global de Producción Total, elaborado por JP Morgan en conjunto con organizaciones de gerencia y abastecimiento, cedió a 49 en julio desde 49.4 el mes anterior, una cifra por debajo de la marca de 50 que separa el crecimiento de la contracción. Esta es la primera vez desde comienzos de 2003 en que el indicador registra dos cifras consecutivas por debajo de la marca de 50.
En tanto, el índice Global de Servicios se redujo a 48.9 en julio desde 49.3 el mes anterior, perjudicado por una caída en la variable sobre las nuevas empresas, que llegó a su menor nivel en siete años.