■ Exige el Ministerio del Interior que 33 políticos y militares franceses sean juzgados
Acusa Ruanda a Francia por el genocidio en que murieron unas 800 mil personas en 1994
Kigali, 5 de agosto. Ruanda acusó hoy a Francia de jugar un papel activo en el genocidio de ese país africano en 1994, en que 800 mil personas murieron, y reclamó que 33 políticos y militares franceses sean juzgados, informó el Ministerio de Justicia ruandés.
El ministro de Justicia, Tharcisse Karugarama, presentó a la prensa las conclusiones del informe sobre el papel de Francia en el genocidio ruandés.
“La persistencia, determinación y el carácter masivo del apoyo francés a la política ruandesa de la masacre muestran la complicidad de los responsables políticos y militares franceses en la preparación y ejecución del genocidio contra los tutsis en 1994”, señaló.
La comisión investigadora interrogó durante dos años a sobrevivientes y testigos de la matanza.
Francia estaba “al corriente de los preparativos” del genocidio, “participó en las principales iniciativas” de la organización y, además, “participó en su ejecución”, según el reporte, el cual dio cuenta que el apoyo francés fue político, militar y diplomático.
“Ante la gravedad de los hechos, el gobierno de Ruanda pide a las autoridades competentes emprender todas las acciones necesarias para llevar a los responsables políticos y militares franceses ante la justicia para que respondan por sus actos”, indicó el informe sobre la investigación.
Junto con el informe de 500 páginas, la comisión incluyó una lista con 33 nombres de dirigentes militares y franceses responsables, entre ellos el ex presidente Francois Mitterrand y el ex primer ministro Dominique de Villepin.
También están acusados Alain Juppé, ex ministro de Asuntos Exteriores y en la actualidad figura importante del partido de Nicolas Sarkozy, así como el entonces primer ministro Edouard Balladur y el político Hubert Vedrine.
Asimismo, el escrito señala que hubo soldados franceses que estuvieron directamente involucrados en los crímenes.
Durante la presentación del informe, Karugarama dio a entender la posibilidad de acciones judiciales contra los culpables.
“Este informe no es un dossier criminal. Es buena base para eventuales medidas legales”, señaló.
Por lo pronto, el gobierno de Francia esperará a tener el informe ruandés indicó el Ministerio de Relaciones Exteriores.
“Todavía no conocemos el informe, que no nos ha sido enviado por el gobierno ruandés, de manera que no estamos en condiciones de reaccionar”, declaró un vocero que pidió el anonimato.