La Jornada Olímpica

■ La clausura, llena de colorido, vistosa tecnología, performances y fuegos artificiales

Los juegos de Pekín, realmente excepcionales, declaró Jacques Rogge

■ El tenor Plácido Domingo, la cantante Leona Lewis y el astro David Beckham, parte del espectáculo

Agencias

Pekín, 24 de agosto. Los juegos de Pekín quedarán en la historia, tras extinguirse a las 21:23 horas locales el fuego olímpico en el estadio Nido de Pájaro de la capital china, luego de permanecer encendido durante 17 días.

Los voluntarios tuvieron un papel brillante en la ceremonia de clausura, donde la constante fueron los coloridos, ruidosos y espectaculares fuegos artificiales.

Destacó la coordinación uniforme de ejecuciones de cientos de participantes, que subían y bajaban por una torre de metal al centro del estadio, o volaban de un extremo al otro, lo mismo que la algarabía generalizada de los 91 mil asistentes al inmueble.

Cantantes, ejecutantes de música, representantes de las etnias locales, artistas, niños y el tenor Plácido Domingo, todos apoyados en el despliegue tecnológico que emplearon los anfitriones, lograron montar un espectáculo inigualable, impactante, de lo mejor.

Seguramente por eso el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), el belga Jacques Rogge, calificó esta justa veraniega como “realmente excepcional”, mediante la cual “el mundo aprendió mucho de China y China aprendió mucho del mundo”. En conclusión, dijo estar “extremadamente satisfecho”.

El mandatario del país anfitrión, Hu Jintao, hizo el esperado balance, al calificar la competencia deportiva de exitosa y referir que “impulsó el espíritu olímpico de la solidaridad, la amistad y la paz”, además de alentar “la comprensión y la amistad mutua entre chinos y los pueblos de todos los demás países”.

Uno de los momentos culminantes fue la entrega de la bandera olímpica al alcalde de Londres, Boris Johnson, y el gran espectáculo que los británicos presentaron en menos de ocho minutos.

Un autobús rojo de dos pisos dio una vuelta sobre la pista de atletismo cubierta para no ser dañada, de donde, al transformarse, ascendió en una plataforma la famosa cantante Leona Lewis, quien acompañada por los compases de Jimmy Page, guitarrista de Led Zeppelin, interpretó el tema Whole Lotta Love.

No podía dejar de aparecer uno de los principales iconos ingleses: el futbolista David Beckham, quien chutó un balón, tesoro para el niño chino que lo atrapó y conservará con celo.

Así, entre vítores, el autobús salió del escenario cubierto por paraguas, echando mano de otro clásico londinense, la lluvia presentada por miles de foquitos adheridos a éstos, en un toque de humor al más puro estilo inglés.

Mientras tanto, en la capital británica y otras ciudades, miles de personas daban la bienvenida a la sede olímpica 2012.