■ Las amenazas del hampa no van a vencer al gobierno federal, dice Germán Martínez
Dramático y doloroso, el clima de violencia e inseguridad: nuevo presidente de la Cámara
■ Diputados y senadores prometen “poner de su parte” para frenar la delincuencia organizada
Ampliar la imagen
Agentes federales presentaron ayer en el hangar de la PGR a tres sujetos presuntamente responsables de las decapitaciones en Mérida
Foto: Francisco Olvera
El dirigente nacional del PAN, Germán Martínez Cázares, afirmó en Hermosillo que al gobierno federal y al blanquiazul no lo van a vencer “las amenazas” del narcotráfico. Al referirse a la disputa interna para la elección de candidato panista a gobernador de Sonora, en la que los aspirantes han hecho pintas en muros, afirmó: “siempre será mejor que haya bardas de partidos que mantas de narcotraficantes”.
Su declaración también se dio en el contexto provocado por dos mantas que aparecieron el jueves –horas antes de la llegada del presidente Felipe Calderón a esta ciudad, así como del hallazgo de 12 cuerpos decapitados en Yucatán. “Vamos a tomar medidas para recuperar la tranquilidad de las calles”, dijo.
En tanto, el presidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, el priísta César Duarte Jaques, consideró que es “dramático y doloroso” el clima de violencia e inseguridad que se vive a lo largo del país, e informó que el Legislativo pondrá su parte para frenar esa ola de criminalidad mediante modificaciones legales para reorganizar los cuerpos policiacos y con el aumento del presupuesto destinado a combatir la delincuencia organizada.
En tanto, los coordinadores de PRI y PRD en el Senado, Manlio Fabio Beltrones y Carlos Navarrete, respectivamente, informaron que impulsarán reformas para frenar el secuestro y la criminalidad. El perredista comentó que se mantendrá atento a la marcha de este sábado contra la inseguridad, para incorporar las demandas y reclamos ciudadanos a las reformas judiciales.
Mientras, en Hermosillo, al definir su agenda para el próximo periodo ordinario de sesiones, el PAN estableció como prioridad legislar en materia de seguridad pública y, en ese sentido, el coordinador de los diputados, Héctor Larios, solicitó la noche del jueves a Felipe Calderón que sus iniciativas en la materia se turnen a San Lázaro antes que al Senado. También comprometió a la diputación panista a aprobar mayor presupuesto para seguridad pública en 2009.
En conferencia de prensa, Martínez Cázares rechazó responder si debido a la intervención del Ejército en tareas que corresponden a la Procuraduría General de la República o a la Secretaría de Seguridad Pública federal se configura un Estado militar.
A su vez, el vicecoordinador del PAN en San Lázaro, Cristián Castaño, consideró probable que gobernadores y alcaldes de todos los partidos se encuentren inmiscuidos en actividades delictivas, porque se han negado a proporcionar información sustancial sobre la condición actual de sus cuerpos policiacos, como “datos sobre la vida de los agentes, el registro fiel de cada una de las armas que forman parte del parque y la infraestructura de los organismos”.
–¿Quiénes son los gobernadores o alcaldes que tienen vínculos con los delincuentes?
–No tengo un padrón, pero sé que hay alcaldes, gobernadores y gente que administra cuerpos policiacos que no han tenido la voluntad de entregar datos de los policías y señalar a los elementos que probablemente no están del lado correcto. Hay un verdadero riesgo de que todos los colores políticos puedan estar involucrados con el crimen organizado, y hayan sido “tocados” por bandas delictivas.
El dirigente del PT, Alberto Anaya, comentó que el hallazgo de 12 cuerpos decapitados en Yucatán es un claro llamado a los gobiernos federal, estatal y municipal para que ya presenten resultados en el combate contra el crimen organizado y el narcotráfico. Se requiere –dijo– “ un golpe de timón” para combatir la delincuencia dentro de las corporaciones policiacas”.
Sobre el tema, el rector de la UNAM, José Narro, declaró en Saltillo que el incremento de la violencia y la criminalidad en el país es “un problema complejo que demanda soluciones complejas”, no sólo la militarización y el despliegue policiaco a gran escala en las ciudadades.
Mientras las autoridades de los diferentes ámbitos de gobierno no tengan claro lo que está ocurriendo, “será difícil ganar la batalla a los criminales”, resaltó.