■ Los medallistas, producto de un esfuerzo propio más que colectivo, expresó
Reconoce Calderón fallas en el sistema deportivo nacional
■ Esta vez debemos tener éxito en revisarlo y corregirlo, dijo
■ Recibió a los taekwondoístas María Espinoza y Guillermo Pérez, así como a las clavadistas Paola Espinosa y Tatiana Ortiz
Ampliar la imagen Los medallistas mexicanos en Pekín 2008 fueron recibidos por Calderón en Los Pinos Foto: Carlos Ramos Mamahua
El presidente Felipe Calderón reconoció a los medallistas olímpicos como resultado de esfuerzos propios a pesar de las adversidades. Citó que otros gobernantes ya se han referido a la necesidad de masificar y mejorar la práctica deportiva y, como los anteriores, se comprometió a lograrlo mediante acciones gubernamentales que involucren a todos los sectores de la sociedad.
Tras una recepción con María del Rosario Espinoza y Guillermo Pérez, ganadores de oro en taekwondo, y las clavadistas Paola Espinosa y Tatiana Ortiz (bronce), acompañados de sus familias, el Presidente salió con todos ellos a la escalinata, y frente a los medios de difusión, después de escuchar frases de agradecimiento de los deportistas por la motivación que les había brindado antes de Pekín 2008, revivió las emociones de la justa olímpica y subrayó el reconocimiento:
“Creo que ha sido mucho más por méritos propios y de sus entrenadores que resultado de un esfuerzo colectivo.
“Me queda muy claro que el sistema deportivo en México requiere una corrección de fondo que permita a nuestro país alcanzar el lugar que le corresponde, acorde con el tamaño de su población, de su economía y de la fuerza de su juventud.”
Llamó a “todos los deportistas mexicanos, sin excepción, especialistas, comentaristas deportivos, que revisemos a fondo el sistema deportivo nacional y lo corrijamos, que podamos detectar qué es lo que está funcionando y reforzarlo, y también, con honestidad, revisar qué no está funcionando y corregirlo.
“Tenemos que masificar el deporte, si se me permite la expresión, de manera tal que los triunfos no sólo se den de manera excepcional y fundamentalmente por méritos propios, como los que Tatiana, Paola, María del Rosario y Guillermo han puesto, sacrificando mucho de su vida personal, superando adversidades, obstáculos burocráticos y muchos problemas, sino que estos resultados (...) sean parte de un proceso que integre plenamente las capacidades y el talento de los jóvenes mexicanos”, expresó.
Colocado al otro extremo, un tanto apartado de los atletas, escuchaba el discurso Carlos Hermosillo, titular de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), quien no tuvo turno en el micrófono.
Por la tarde, el despacho de prensa del organismo centró el boletín informativo en el reconocimiento a los competidores e ignoró toda esa parte amplia del discurso presidencial, leído en tono de llamada de atención.
“Sé que se ha dicho en otras ocasiones y que hay escepticismo –continuó el mandatario–; sé que en otros gobiernos también se ha hablado de revisar el deporte y corregirlo. Hoy tendremos que hacerlo nuevamente, y esta vez debemos tener éxito.
“Lo lograremos si en este ejercicio de revisión ponemos tan sólo una parte del coraje y la determinación que llevaron a estos jóvenes a ganar la medalla olímpica y poner muy en alto el nombre de México.”
Instó a mejorar el deporte de alto rendimiento rumbo a Londres 2012, y como fase intermedia, aprovechar la localía de los Juegos Panamericanos en Guadalajara. Tras insistir en “transformar el sistema deportivo para que ayude a prevenir graves riesgos de salud”, vino la promesa: “seguiremos trabajando duro y en equipo para que nuestros deportistas cuenten con el apoyo que necesitan para un mejor entrenamiento, para no tener una preocupación en el ingreso y también que cuenten con el equipo y las instalaciones adecuadas para desarrollarse”.