■ Promueven en varias instituciones documento con esa exigencia
Demandan expertos que se suspenda la Reforma Integral a la Educación Básica
Un grupo de reconocidos expertos en enseñanza, entre ellos María de Ibarrola, Eva Taboada y Germán Álvarez, exigen la suspensión de la Reforma Integral a la Educación Básica, al señalar, entre otros motivos, que la “decisión política” de disponer un cambio curricular en plazos perentorios desata un proceso que promete desmembrar antes que articular la enseñanza en ese nivel; por otra parte, ese proyecto ha sido presa de los intereses políticos coyunturales del sindicato magisterial y del gobierno federal.
Además destacan que una transformación profunda requiere que la Secretaría de Educación Pública (SEP) “asuma sus obligaciones constitucionales y facultades inalienables en lugar de renunciar a ellas, ante los intereses particulares de la organización sindical y otras entidades privadas”.
En un documento firmado por 19 miembros del Departamento de Investigaciones Educativas del Centro de Investigación y Estudios Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (Cinvestav), que comienza a circular entre expertos de otras instituciones para que se sumen a esa petición, expresan que ninguna reforma curricular puede mejorar la práctica pedagógica y sus resultados si enfrentan obstáculos derivados de la operación del sistema escolar. “En lugar de emprender la transformación necesaria en las estructuras de mando y las normas reglamentadas y usuales de operación técnico-administrativo, el actual régimen ha consolidado la injerencia sindical en estos aspectos claves.”
En el planteamiento, que será presentado el miércoles próximo en dicho departamento, se exponen nueve observaciones sobre esa modificación en el nivel primaria, cuya etapa experimental comenzó en 5 mil escuelas en el presente ciclo escolar.
Entre ellas plantean que la iniciativa busca reformar el programa vigente desde 1993 para articularlo con los de prescolar y secundaria: “El plan de prescolar, vinculado con el de primaria de 1993, empezó a aplicarse en 2004. El de secundaria fue resuelto en el marco del propio nivel y se inició para el primer grado en 2006. En el presente año se completaría la puesta en práctica de esas dos reformas, por lo tanto sus resultados no se conocen... Por las deficiencias tanto en el interior como en los tres niveles, la articulación propuesta corre el riesgo de agravar, en lugar de corregir, los problemas existentes”.
Además observan que el diseño curricular por “competencias” –como se establece en la pretendida reforma– todavía está sujeto a intenso debate internacional e “implica desafíos pedagógicos y didácticos para los que no parece haber ninguna previsión”.
Por otro lado, se requieren materiales y coordinación general de equipos interdisciplinarios para vigilar la articulación del proyecto dentro de cada ciclo y a lo largo de los tres niveles. Pero la iniciativa actual se efectúa “bajo presión y de manera desarticulada entre diversas comisiones, dependencias públicas y empresas privadas, sin que la SEP asuma la responsabilidad de garantizar su calidad y consistencia”.
Además, la elaboración de un currículo nacional para ese nivel necesita considerar la diversidad sociocultural del país, en el que existen escuelas multigrado, para migrantes o telesencundarias, pero el plan anunciado “agrava en lugar de atender este problema central”.
Por último destacan que un cambio profundo en la educación básica precisa un replanteamiento sustancial de las bases legales y normativas que regulan las atribuciones y funciones del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación. Entre otros firmantes se encuentran Ariadna Acevedo, Alejandra Pellicer, David Block, Eduardo Weiss y Susana Quintanilla.