El proyecto oficial requerirá “cirugía mayor”: CCI
De acuerdo con un análisis sobre la propuesta de presupuesto para el campo, realizado por la Central Campesina Independiente (CCI), éste requiere de una “cirugía mayor” en la Cámara de Diputados, para atender “la parte más sensible del campo mexicano, que es incrementar la producción y garantizar la alimentación de la población nacional”.
En el estudio se puntualiza que se “reducen sustancialmente” los recursos de los programas que benefician a campesinos pobres, en particular aquellos planes que gestionan las organizaciones productivas, como es el caso de FAPPA, Vivienda Rural y Fonaes.
“Con ello el gobierno federal deja en claro que su política hacia las organizaciones sociales del campo es desaparecerlas o neutralizarlas”, advirtió Rafael Galindo Jaime, secretario general de la CCI, quien argumentó que al reducir el gasto a los programas productivos, las autoridades apuestan a mantener la pobreza en el sector, “ya que no se creará capital físico para que la población genere sus propios medios de vida”.
No obstante estas reducciones al campo, indicó, el gobierno aumentó algunos montos a estrategias sociales que impactan el programa especial concurrente del sector. En este renglón el incremento es de 10 mil 492 millones de pesos, que representa una alza de 5.14 por ciento, lo cual quedará “nulificado por la inflación que, anualizada hasta agosto, llegó a 5.57 por ciento”.
En entrevista aparte, Guadalupe Martínez Cruz, dirigente del Consejo Nacional de Sociedades y Unidades con Campesinos y Colonos (Consucc), señaló que para el sector se requiere canalizar por lo menos “20 mil millones de pesos más que los otorgados para este año; esto es, pasar de 204 mil millones de pesos a 224 mil millones”.
Agregó que para lograr ese aumento la organización que dirige se acercará a los legisladores e intentará hacerles entender que “no se debe descobijar al campo” ante las necesidades de seguridad pública, más aun ante la actual crisis alimentaria y la necesidad de contar con garantías en esta materia.
En cuanto al subejercicio en el sector, comentó que esto no es sólo responsabilidad del gobierno federal, sino también de las administraciones de los estados y municipios, las cuales no cuentan con una planeación para aplicar los recursos. Dijo que por eso las organizaciones campesinas no sólo deben estar atentas a cuánto ascenderá el presupuesto, sino también vigilar su aplicación cabal.
Ayer, la Secretaría de Agricultura y Ganadería desestimó lo dicho por el diputado Héctor Padilla, presidente de la Comisión de Agricultura y Ganadería de la Cámara de Diputados respecto al subejercicio.
“La Sagarpa informa que durante el periodo enero-agosto de este año fueron programados recursos por un orden superior a 49 mil millones de pesos y que su ejercicio lleva un avance de 95.6 por ciento del gasto programado”, sostuvo la dependencia.