■ Dudan que se alcance crecimiento de 3% y la inflación sea de 3.8%
Cuestiona el CEESP optimismo del paquete económico 2009
El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) cuestionó las cifras optimistas que refleja la propuesta del paquete económico para 2009, enviado por la Secretaría de Hacienda al Congreso de la Unión, toda vez que prevalece un ambiente en el que constantemente se hacen ajustes a la baja en los pronósticos de crecimiento.
También puso en duda que se alcance una meta de crecimiento de 3 por ciento para 2009 y se mantenga un nivel de inflación de 3.8 por ciento, como prevé el paquete fiscal, debido al plan de mantener “un mayor desliz” en los precios de la gasolina.
En su reporte semanal, el CEESP señaló que el descenso estimado en el aumento de la inflación “pareciera estar más en línea con una perspectiva de menor crecimiento económico”. Apuntó que es de llamar la atención el cálculo del precio del petróleo para 2009 en 80.3 dólares por barril, pese a la reciente tendencia a la baja.
El pronóstico oficial de inflación de 3.8 por ciento anticipa que las presiones inflacionarias se reducirán de manera importante, según las autoridades, ayudadas por la baja de los precios internacionales de productos básicos. Sin embargo, en su publicación semanal Análisis Económico, el organismo del sector privado indica que las presiones persisten, debido a que aún no se refleja totalmente el traslado de costos a los precios finales. Además se tiene planeado mantener mayores incrementos en los precios de la gasolina, lo que podría mantener la inflación por arriba del nivel calculado por el gobierno, indicó.
En materia de ingresos, apuntó el CEESP, la Secretaría de Hacienda prevé obtener recursos 5.7 por ciento por arriba de la Ley de Ingresos aprobada para 2008, cifra que representa sólo 0.4 por ciento más que lo estimado al cierre del año pasado.
El texto anticipó que el crecimiento de 4.5 por ciento en recaudación tributaria, prevista en el paquete fiscal para 2009, se debería a una mayor actividad económica y no por una eficiencia recaudatoria.