■ Reconocen la labor altruista de la australiana en el Fashion Fest 2008 de Liverpool
La moda, en binomio indisoluble con el mundo del espectáculo, dice la modelo Elle Macpherson
Ampliar la imagen Con 25 años de trayectoria, la modelo también ha incursionado en el cine Foto: Francisco Olvera
La modelo australiana Elle Macpherson, conocida en el mundo de la moda como El Cuerpo, surcó con 32 pasos la pasarela que inauguró la 11 edición del Fashion Fest 2008, en el que se presentan las tendencias de la moda para la temporada otoño-invierno.
Macpherson dijo: “De la primera cosa que me di cuenta al llegar a México fue el gran nivel que tienen en el diseño y la moda; es una experiencia bonita compartir esta pasarela con todos ustedes”.
Agregó: “Además noté que aquí en México, en cuestión de moda, se aprecia mucho a la mujer; los diseñadores honran mucho su figura, se nota la importancia que le dan en los modelos que he visto en la tienda, que por cierto está al nivel de las de Nueva York y Londres”.
Antes de iniciar la breve charla con los medios, Elle Macpherson se paseó por la sucursal Santa Fe, observando los productos; uno de los que mereció toda su atención fue el libro de la pintora mexicana Frida Kahlo, el cual contempló durante varios minutos.
Macpherson, quien también es conocida por contribuir a causas filantrópicas, mencionó: “Compro con American Express; trabajo con Revlon y con mi compañía Red, que destinan un porcentaje de sus ingresos para ayudar a la niñez. Creo que Liverpool es una empresa que persigue grandes valores, por eso estoy muy complacida de estar aquí”. Además en este contexto El Cuerpo recibió un reconocimiento especial por la labor altruista que realiza desde hace varios años. La distinción fue entregada por Enrique Castillo Pesado, representante del Consejo Universal Excellence Award.
Participación en el cine
La modelo australiana también ha incursionado en el mundo cinematográfico en sus 25 años de carrera profesional: en Alice, de Woody Allen; en Sirenas, Batman y Robin, compartiendo créditos con George Clooney; en The Edge, con sir Anthony Hopkins, y en El espejo de dos caras, con Barbra Streisand.
Acerca de su actividad en esa franja mencionó: “Me han llegado muchas ofertas para hacer cine y televisión, pero actualmente estoy enfocada en el desarrollo creativo de los productos que llevan mi nombre y, especialmente a mis dos hijos y mi marido. Me gusta mucho el mundo de la moda, en el que he estado más de 25 años, pero prefiero a mi familia”.
Según la percepción de la australiana en la pasada década “el mundo del fashion ha crecido enormemente, se ha convertido en una empresa poderosisíma que deja una derrama económica muy importante en todo el orbe; además ha establecido una sana relación con el mundo del espectáculo; se vincula con muchas personas del medio, se hacen programas como American Next Top Model y está presente en las alfombras rojas de festivales internacionales de cine y entregas de premios”.
Un ligero aire de los 70
Por otra parte, en la pasarela pudo verse una amplia variedad de propuestas para la temporada otoño-invierno 2008, la cual giró en buena parte por lo andrógino, pues los diseñadores retomaron la corbata y las camisas en sus colecciones.
Cerca de 60 modelos lucieron las prendas, en las que predominaron colores como morado, fiusha y azul en sus tonalidades más oscuras con estampados vintage de finales de los años 70, geométricos y desestructurados. En las propuestas figuran chalecos, blusas con escarolas y de manga larga, trajes sastres, faldas amplias, sacos largos y cortos, así como minivestidos, de cortes estilizados. Por supuesto que los pantalones y las básicas minifaldas de mezclilla que no pasan de moda también resaltaron en las tendencias para esta temporada.
En lo que se refiere a accesorios imperan las maxibolsas y las gafas grandes con armazones de forma cuadrada; mientras que en calzado las favoritas fueron las botas en diferentes largos, acompañadas de mallas en colores uva, café y negro.
Los vestidos de noche en colores rojo, morado y negro también estuvieron presentes, causando sensación por sus audaces escotes de espalda y frente, así como por los bordados de pedrería.
Los abrigos figuraron en la pasarela en diversos largos, así como los sacos cruzados, con estampados de rayas.