■ Fueron provocados por el crimen organizado, considera
Condena enérgica en el Senado a los actos terroristas de Morelia
■ Rinde homenaje a las víctimas y pide se les proporcione apoyo oficial
El Senado de la República condenó los atentados contra la población civil en Morelia, entendiéndolos como “un acto terrorista provocado por el crimen organizado” y guardó un minuto de silencio por las víctimas.
Con el aval de todas las fuerzas políticas, el Senado se comprometió a apoyar todas las iniciativas, tanto de los gobiernos –federal, estatal y municipal– como de la sociedad civil y de los medios de comunicación, para frenar la violencia desatada por el crimen organizado y recuperar la seguridad ciudadana y del Estado mexicano.
Durante la sesión, por acuerdo de todos los grupos parlamentarios se presentó fuera de agenda al pleno un punto de acuerdo para condenar de manera enérgica y categórica los “actos terroristas” contra la población civil en Morelia, así “como todos los hechos de violencia provocados por el crimen organizado en el país en los últimos días”.
En ese mismo punto de acuerdo, el Senado se solidarizó con las familias de las víctimas y demandó a las autoridades brindarles las atenciones necesarias para enfrentar las pérdidas o lesiones de sus familiares.
También hizo un exhorto a las autoridades federales y estatales para investigar los atentados y establecer a la brevedad los mecanismos de coordinación y colaboración necesarios para identificar a los responsables de esos condenables actos, capturarlos, juzgarlos y encarcelarlos.
En tribuna, el senador priísta Melquiades Morales propuso: “Este Senado debe pronunciarse por una respuesta inmediata, enérgica y contundente, no hay espacio para vacilaciones ni para posponer soluciones”.
Agregó que “el Senado fue una valla insalvable para el dictador Victoriano Huerta y, tomando como ejemplo a Belisario Domínguez, hagamos lo que nos corresponde y demandemos al Ejecutivo federal y a los gobiernos estatales una respuesta de Estado firme, a la altura del desafío más grande que ha enfrentado el país”.
Subrayó que “no hay lugar para pulsos temblorosos, la fuerza sólo puede ser legítimamente utilizada por el Estado. Éste no es un llamado a la mano dura, sino al uso inteligente de los instrumentos legales que tienen el jefe del Ejecutivo y los gobiernos locales”.
Por el PRD, el senador michoacano Jesús Garibay destacó que “por ser Michoacán punta de lanza de muchos eventos, la mayoría nacionales, llegamos a sufrir las consecuencias. Esto no va a hacer cambiar la forma y la decisión, la convicción por la defensa de nuestro estado y de nuestro país. No importa lo que tengamos que pagar; no importa cuánto tengamos que ofrendar, lo que tengamos que hacer”.
Por el PAN, el senador Marko Cortés destacó en tribuna que “es urgente que los poderes del Estado, tanto federales como locales, aceleren el cumplimiento del Acuerdo nacional para la seguridad, justicia y legalidad; es una necesidad apremiante que los gobiernos locales, efectivamente, se coordinen con la Federación y municipios, que se depure y evalúe a los ministerios públicos y a los cuerpos policiacos”.
Hizo un llamado a jueces y magistrados “a que apliquen las sanciones y penas más duras en contra de quienes vulneren la paz social o realicen acciones violentas; es necesario que el Estado blinde a los jueces contra la corrupción, extorsión y amenazas. No es hora de reproches, la humildad no se regatea en momentos difíciles. No podemos regatear lo que está pidiendo en este momento el Presidente; necesitamos unidad y no politizar este asunto”.
Por Convergencia, el senador Dante Delgado dijo: “Lo que sucede es que no ha habido inteligencia en la investigación de los delitos. Se sacó al Ejército Mexicano a las calles, en lugar de haberse actuado en la inteligencia contra el crimen, en la inteligencia policiaca, de seguridad nacional, militar.
“No podemos permitir que el atentado perpetrado en Morelia, que ha enlutado a todos los mexicanos, sea utilizado artificialmente para politizar una circunstancia que hoy debe permitirnos a todos abrir los ojos y evitar que desde las tribunas del Congreso se pretenda confundir, como lamentablemente lo ha intentado el ciudadano presidente de la República en su discurso apresurado del 16 de septiembre.
“Pretender confundir la unidad nacional en torno a posiciones claramente definidas de proyecto de nación, de definición de objetivos para alcanzar el pleno desarrollo y utilizarlo como lo están haciendo algunos medios, para pretender justificar acciones de represión en contra de la sociedad que participa con libertad al amparo del mandato constitucional, puede ser muy doloroso.”