Usted está aquí: sábado 20 de septiembre de 2008 Política Centran las pesquisas en dos bandas del crimen organizado

■ Detienen en Michoacán a cuatro hombres “en actitud sospechosa”

Centran las pesquisas en dos bandas del crimen organizado

■ Unos 10 narcos habrían participado en ataque, según informes de PGR

Gustavo Castillo, Ernesto Martínez y Antonio Aguilera (Enviado, corresponsal y La Jornada Michoacán)

Morelia, Mich., 19 de septiembre. Informes de la Procuraduría General de la República (PGR) y autoridades michoacanas refieren que en los ataques con granadas de fragmentación a la población civil el pasado 15 de septiembre –con saldo de siete muertos y 132 heridos–, participaron al menos 10 miembros del narcotráfico, que podrían pertenecer a La Familia, ligados a Heriberto Lazcano Lazcano, o a un grupo que encabeza Eduardo Costilla, El Coss, quienes se disputan el liderazgo del cártel del Golfo y el control de Michoacán como zona de producción y trasiego de enervantes.

El pasado 15 de septiembre, frente al palacio de gobierno al filo de las 7 de la noche había entre la multitud varios hombres solos, sin banderas y con mochilas a la espalda que no participaban de la celebración, sino que observaban desde distintos puntos hacia la Plaza Melchor Ocampo.

A las 23 horas el ambiente era totalmente festivo. Miles de personas estaban congregadas sobre la avenida Madero a lo largo de 10 calles. Más de 200 policías vigilaban la zona aledaña al palacio de gobierno, y alrededor de 300 en todo el centro de Morelia. Minutos después, cuando el gobernador Leonel Godoy terminaba sus arengas patrióticas, sobrevino el primer estallido.

Información de la policía de Michoacán refiere que tras el estallido, por el equipo de sonido que había servido en las presentaciones de grupos musicales durante la tarde, “se escuchó que piden apoyo de ambulancias y paramédicos en los lugares de plaza, en el escenario en Madero Norte y Madero, donde al parecer explotó un lugar donde había juegos pirotécnicos, habiendo varios lesionados y no se aclara cuántos (sic)”.

Los reportes elaborados en el Centro de Control, Comunicación y Comando (C-4), señalan que miembros de los Grupos de Operaciones Especiales (Goes), “reportan otra explosión, al parecer granada, en Quintana Roo y Madero, igual con varios lesionados y no se sabe cuántos”.

Según funcionarios federales, en las pesquisas de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) se han obtenido evidencias de que en la Plaza Melchor Ocampo dos hombres se habían apostado en una jardinera horas antes de la ceremonia del Grito, y que éstos habrían lanzado la primera granada, la cual golpeó en la cabeza a un hombre, rodó por el piso y estalló.

Una denuncia anónima, fechada el 17 de septiembre, reveló a las autoridades que “dos hombres, uno vestía ropa negra, cabello corto, con una cicatriz en la cara del lado izquierdo, complexión robusta, moreno y portaba una bandera mexicana grande, y el otro que lo acompañaba vestía una playera anaranjada, con pantalón oscuro, cabello corto negro, robusto, moreno, éste no dejaba que ninguna otra persona se acercara a su compañero que tenía una actitud bastante sospechosa”.

En la Paza Melchor Ocampo el hombre que arrojó el artefacto habría dicho: “perdónennos, pero esto era necesario”. Supuestamente su expresión atrajo la atención de los presentes y permitió que se elaborara su retrato hablado.

La explosión de la segunda granada ocurrió a la misma hora, pero en el cruce de Quintana Roo y Madero, pese a que policías habían cerrado el paso vehicular.

Según versiones de funcionarios federales, tras el estallido de la primera granada, los dos hombres habrían huido del lugar cruzando la plaza hacia la calle trasera de la catedral, y más adelante supuestamente eran esperados por dos vehículos llenos de hombres armados que, de acuerdo con reportes policiacos, se enfrentarían a las 23:50 con policías estatales en la salida a Charo, a la altura de Atapaneo.

El informe obtenido refiere que en la frecuencia policial se escuchó “la persecución de dos vehículos con placas del Distrito Federal” en los que “al parecer iban los presuntos responsables de (lo sucedido en la) zona centro”. Señala que los uniformados “se negaron a perseguir a los sospechosos al no tener apoyo para detenerlos”.

Piden refuerzos

A las 23:55, otro reporte refiere que un comandante de la policía local ordenó por radio que se informara del enfrentamiento en una comandancia cercana para que enviaran refuerzos a los preventivos que estaban en Atapaneo, ya que “se detectó a cuatro camionetas color blanco, con gente a bordo armada”.

Supuestamente una de esas camionetas, fue hallada a las 0:40 horas del 16 de septiembre fuera de la discoteca Ego, “con impactos de arma de fuego”. A esa hora todos los clientes estaban siendo desalojados por una amenaza de bomba. La camioneta blanca no ha sido localizada.

De acuerdo con la información obtenida de funcionarios federales, los responsables de la segunda explosión habrían huido hacia Plaza del Carmen. En ese lugar, según un reporte policial registrado a las 4:52 horas del 16 de septiembre, en el C-4 se informó que “un taxi recogió (a las 0:30 horas) a cinco hombres vestidos de Goes (policías) en la Plaza del Carmen, y los llevó a la colonia Mariano Escobedo, Prolongación de Quinceo, donde los mismos se vistieron de civil con sombreros, y ahí mismo se encontraban tres vehículos, una Windstar con placas de Guerrero; una Silverado, con placas de Jalisco, y un Jetta negro”. De este grupo no se supo nada más tarde.

Hasta el momento, señalaron funcionarios de la PGR, las investigaciones apuntan a miembros de La Familia o del grupo de Eduardo Costilla, y que lo sucedido forma parte la “guerra” entre grupos rivales del cártel del Golfo por el control de la “plaza”.

Habla Godoy

Por su parte, el gobernador de Michoacán, Leonel Godoy Rangel, afirmó que hasta el momento no existen elementos que vinculen a los miembros de La Familia con los hechos violentos del pasado lunes.

Esta tarde, policías ministeriales y agentes federales detuvieron y pusieron a disposición de la PGR a cuatro personas de cabello corto, vestidas con jeans y “en actitud sospechosa” atrás de la Catedral de esta ciudad. Hasta ahora las autoridades federales no han dado a conocer la identidad de los detenidos, pero la procuraduría local reveló que uno tiene antecedentes penales.

Con información de Notimex

 
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