Atribuyen a Al Qaeda y talibanes el atentado en Pakistán
Islamabad, 21 de septiembre. El gobierno de Pakistán atribuyó a militantes talibanes cercanos a la red Al Qaeda el ataque suicida del sábado frente al hotel Marriott de Islamabad, que dejó al menos 53 muertos –entre ellos el embajador de República Checa– y más de 260 heridos.
Las autoridades presentaron un video en el que se puede observar cómo un camión cargado con 600 kilos de explosivos derriba la primera valla de seguridad del lugar, para detenerse después frente a un rastrillo metálico que le corta el paso.
La grabación muestra al chofer del vehículo, quien empieza a discutir agitadamente con los guardias para que lo dejen pasar. A continuación, hace estallar una pequeña bomba que le prende fuego a la cabina, y que los guardias no logran apagar.
Minutos después, la cámara deja de filmar por la fuerte explosión, que devastó prácticamente todo el hotel y pudo escucharse a varios kilómetros a la redonda.
El ataque, considerado por el ejército paquistaní como uno de los más letales cometidos en la capital, “tiene el sello de Al Qaeda” por su nivel de complejidad y poder, declaró a Afp una fuente cercana a las investigaciones.
Confirmados, 53 decesos
Aunque al principio se había calculado en más de 60 la cantidad de muertos, hasta el momento sólo se ha podido confirmar el deceso de 53 personas, entre las que se cuentan el embajador de República Checa, Ivo Zdarek, pero no se descarta que la cifra pueda aumentar, ya que varios huéspedes siguen atrapados entre los escombros del edificio.
El atentado coincide con el primer aniversario de un llamado de Osama Bin Laden para iniciar la “guerra santa” en Pakistán, y ocurre en momentos en que los ejércitos estadunidense y paquistaní han multiplicado sus acciones militares contra grupos armados islámicos en la frontera con Afganistán.
“Están dando un mensaje muy claro de que si el gobierno sigue con estas políticas, esto es lo que harán en respuesta”, afirmó el analista y general retirado Talat Masood, en entrevista con la agencia Reuters.
A pesar de que las autoridades locales cooperan con las fuerzas estadunidenses en la “guerra contra el terrorismo”, el pasado 11 de septiembre se dio a conocer que el presidente George W. Bush ha autorizado bombardeos en territorio paquistaní sin el consentimiento de Islamabad, dejando incluso civiles muertos, lo que ha sido condenado por diversos sectores del país asiático.