■ El prestigio como actor no me lo da la academia, dice orgulloso
Ernesto Gómez Cruz listo para gritar ¡luces, cámara, acción!
■ Recibe homenaje por 40 años de carrera en el cine mexicano
Su trabajo histriónico en más de 150 películas han hecho de Ernesto Gómez Cruz (Veracruz, 7 de noviembre de 1933) un primer actor que festeja este año cuatro décadas de representar algunos de los personajes más polémicos del cine nacional. Ha acumulado experiencia para ahora plantearse el proyecto de dirigir un corto, que realizará tan pronto como su saturada agenda y un presupuesto adecuado lo permitan.
En entrevista posterior al homenaje que le organizaron Filmeweb y el Centro Cultural Contempo, dentro del ciclo El cine mexicano y sus estrellas, en el corazón de la Zona Rosa, expuso que causaron controversia los temas de cintas como Aguandar Anapu, El crimen del padre Amaro y El callejón de los milagros, que se proyectó al final de la ceremonia de reconocimiento.
Su primera actuación data de 1966, en la película Los Caifanes, al lado de Julissa, Óscar Chávez, Eduardo López Rojas, Enrique Álvarez Félix y Sergio Jiménez. Por su trabajo recibió una Diosa de Plata.
En El callejón de los milagros, dirigida por Jorge Fons, con la producción de Alfredo Ripstein Jr., Gómez Cruz interpreta a Don Ru, un hombre maduro que decide manifestar su homosexualidad. “Alfredo Ripstein se pasó varios años trabajando para hacer esta obra. Para mi gusto están bien cuidados el ambiente, los actores y los técnicos de iluminación, para que se viera real el entorno y no un set.
“Lo vimos en esta proyección: son las calles normales de La Merced, la gente, que no son extras, sino personas que pasaban por ahí. Es un barrio difícil porque siempre lo rodean vendedores y compradores. Es una zona populosa.”
–¿Cuál fue su aportación?
–Bueno, el director da indicaciones, porque estamos enfrente de una cámara que tiene un espacio y una iluminación, de los cuales no podemos salir. El director debe estar convencido de que sus actores lo entienden. Lo logró.
“Por mi lado, mi trabajo implicó estudiar al personaje; no se trata de sólo memorizar los diálogos, pues hay que canalizar la esencia de lo que es el personaje. Si no logras esto no sale creíble. Todo es a base de platicar con él (el personaje), en las noches o el día. Es una cosa como de locos, pero sí se puede.”
–¿Piensa dirigir?
–Esa es una de mis grandes motivaciones. Voy a empezar con un cortometraje. Por ahí tengo el guión, y no es para demostrar que en 40 años de carrera, desde Los Caifanes, las puedo, sino que es un gusto, el cual no creo que se me dificulte.
“Me tengo que dar tiempo, eso sí. El tema es el de las madres solteras y se filmará más o menos en el barrio donde se grabó El callejón de los milagros para lograr esa textura en las imágenes.
“Va a ser algo breve, pero será un gusto. Me falta tiempo, pues afortunadamente siempre tengo un montón de trabajo, proyectos que me ofrecen y que los puedo hacer, pues también uno tiene que vivir, tener el elemento económico para poder subsistir, en este momento en que todo está muy caro.
“Habrá un tiempo que iré buscando para eso. Ya casi está, para decir ¡cámara!, ¡acción! El guión es de una amiguita mía que estudió en Televisa. Se llama Ángeles.”
Otro proyecto es el de dar “orientación escénica a gente que tenga esa inquietud, pero no reúne los requisitos ni el dinero para estudiar en una universidad.
“Claro, algo les ha de costar, porque tampoco se pueden regalar ni la experiencia ni el tiempo, pero lo haré con mucho gusto para poder formar y guiar.”
Otro plan, otra meta, es construir una carpa para dar trabajo a muchos actores. “Aquí retomaría lo que he hecho con buenos resultados. A mí el prestigio como actor no me lo da la academia y eso es lo que quiero transmitir. Quien no tiene la capacidad solo se irá alejando. Espero encontrar a muchos elementos que como yo surgieron de la nada y agarraron las cosas con seriedad y esfuerzo.”
Informó que estudia dos proyectos de películas, de los cuales no quiso adelantar nada porque aún es muy pronto para ello. “Los proyectos se pueden caer. Me quemaría si digo que voy a hacer una película y aún no hay nada. Desgraciadamente todo es cosa de dinero, y tratándose de cine, más.”