■ “Estamos entrando en un periodo mucho más complicado de lo anticipado”, reconoce

Caída de 2,500 mdd en remesas por crisis en EU, prevé Carstens

■ Implica una disminución de 7 a 8% de los ingresos para México por ese concepto, señala

■ Hoy a la nación vecina le dio pulmonía y “nosotros estamos con catarro”, afirma en el Senado

Roberto González Amador

La caída “preocupante” en la actividad económica de Estados Unidos provocará una disminución de 2 mil 500 millones de dólares en el ingreso de remesas, recursos que en los últimos años contribuyeron a elevar el consumo interno y reducir la pobreza, anticipó Agustín Carstens Carstens, secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

“Estamos entrando en un periodo mucho más complicado de lo anticipado”, resumió ayer Carstens, al hablar ante senadores sobre la situación económica del país después del agravamiento de la crisis financiera en Estados Unidos, que comienza a trasladarse en aquel país a la producción y el empleo. El costo para México va más allá de la disminución en el ingreso de remesas. Se reflejará también en un menor crecimiento, aunque el funcionario federal insistió en que hoy el país está mejor plantado para hacer frente a un entorno internacional revuelto.

Se invierte situación

“En el pasado a Estados Unidos le daba un catarro y a nosotros pulmonía”, mencionó Carstens, en alusión a la conocida analogía sobre el efecto de las crisis de aquel país en la economía mexicana. “Hoy se puede decir lo inverso: a Estados Unidos le dio pulmonía y nosotros estamos con un catarro”, dijo, en una comparecencia ante integrantes de la Comisión de Hacienda del Senado.

Un efecto inmediato de la crisis estadunidense sobre México será en las remesas, reconoció el funcionario, al responder a una pregunta del senador José Calzada, del Partido Revolucionario Institucional (PRI).

Como efecto de la desaceleración de la economía de Estados Unidos, país donde trabajan cerca de 10 millones de mexicanos, ocurrirá una disminución en el ingreso de remesas “que pienso que será de 2 mil 500 millones de dólares, en un universo que alcanza 25 mil millones de dólares”, la cifra anual de recursos que envían al país los mexicanos que trabajan allá, agregó el funcionario.

La disminución en las remesas, abundó el titular de Hacienda, implica una reducción de 7 a 8 por ciento respecto del total. La caída, dijo, se debe a que “muchos compatriotas que participan en la industria de la construcción en Estados Unidos; eso es una preocupación”.

Reconsiderar precio del petróleo

Indicadores del Banco de México y de organismos como el Banco Interamericano de Desarrollo y el Banco Mundial establecen que en los últimos años las remesas, la mayor fuente de divisas del país después del petróleo, se convirtieron en un factor de impulso al mercado interno, a través de elevar el nivel de consumo de las familias, así como de reducción de la pobreza. En promedio, una de cada cuatro familias mexicanas recibe remesas.

Los recursos para financiar el presupuesto federal de 2009 dependen esencialmente de la exportación de petróleo, como planteó ayer el titular de Hacienda a los senadores. Para elaborar la propuesta de presupuesto de gasto federal del próximo año se empleo como referencia que la mezcla mexicana de crudo se exportará en el siguiente ejercicio a un precio promedio de 80.3 dólares por barril.

Sin embargo, Carstens planteó la conveniencia de “ser prudentes” e incluso revisar esa estimación, a la luz de un ajuste a la baja de casi 40 dólares en el precio de referencia internacional, ocurrida en los últimos tres meses.

“Compartimos la preocupación de entrar en una situación de recortes al gasto público si disminuye el precio internacional del petróleo”, respondió Carstens al senador Pablo Gómez, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), quien cuestionó la solidez de las cifras que sostienen el presupuesto del próximo año ante la cambiante realidad económica de las últimas semanas.

“En un recorte del gasto todos perdemos y yo, como secretario de Hacienda, no quiero estar en esa circunstancia de usar la tijera”, dijo Carstens.

Gran parte de la dinámica de ingresos públicos del próximo año va a depender de la evolución de los ingresos petroleros, agregó Carstens. Se espera, dijo, una disminución de 100 mil barriles en la plataforma de producción, que será en 2009 de dos millones 150 mil barriles por día en promedio. Sin embargo, añadió, esa merma se anticipa que sea repuesta parcialmente por nuevos yacimientos.

Añadió que la reducción en el precio del petróleo durante los últimos meses “ha sido importante” y “hay que dar seguimiento para que se tome una decisión responsable, quizá reestimando la formula de cálculo del precio conforme nos acerquemos al momento de aprobación del presupuesto para 2009”, agregó.

Se investiga lavado de dinero

Según el Fondo Monetario Internacional, el precio internacional de referencia del petróleo disminuyó en los últimos tres meses de 140 a 103 dólares por barril.

Durante la comparecencia de casi cuatro horas de este jueves, en la sala Octavio Paz del Senado, el titular de Hacienda planteó que el aumento de recursos públicos propuesto por el Ejecutivo federal para combatir la delincuencia toma en cuenta que para atacar al crimen organizado no basta sólo con dinero, pero que es necesario aumentar los recursos para mejorar la capacidad de respuesta y el equipamiento de la fuerza pública.

Informó que en este momento hay en curso 84 averiguaciones previas sobre lavado de dinero, elaboradas a partir de reportes elaborados por la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda, aunque, interrogado por la senadora Minerva Hernández, del PRD, declinó dar información sobre los montos de recursos de origen ilegal que son blanqueados en México.