■ Celebran 52 aniversario de la llegada del Granma a la isla

México y Cuba “recuperaron la confianza mutua”: embajador

■ El diplomático dijo que Felipe Calderón visitará la nación caribeña

Patricia Muñoz Ríos

México y Cuba ya “recuperaron la confianza mutua”; quedó totalmente superada la etapa de desencuentros e incluso el gobierno mexicano ya aceptó la invitación para que el presidente Felipe Calderón visite esa nación en 2009 y sólo falta por definir la fecha, señaló ayer el embajador de ese país, Manuel Francisco Aguilera de la Paz, durante la celebración del 52 aniversario de la llegada a la isla del yate Granma, el cual partió de México.

El diplomático sostuvo que Felipe Calderón ya aceptó la invitación que le hizo el ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Felipe Pérez Roque, a nombre del presidente Raúl Castro, por lo que el encuentro entre ambos jefes de Estado debe producirse en 2009, pero todavía falta que ambas partes fijen –de común acuerdo– la fecha exacta.

Esta representación diplomática conmemoró ayer un aniversario más del arribo de la embarcación que llevó en 1956 a 82 jóvenes encabezados por Fidel Castro a Cuba, para iniciar la revolución en aquel país, fecha que también es celebrada como el Día de las Fuerzas Armadas Revolucionarias en la isla.

Amistad y confianza

En este marco, el embajador hizo ver que este aniversario histórico hermana a los dos pueblos, e hizo ver que estas naciones vivieron un periodo de diferencias y desencuentros; la relación se ha restañado y “va para mejor”, dados los avances diplomáticos que se han dado desde que actual gobierno asumió el poder. Ya se recuperó totalmente la confianza mutua y la relación se normalizó plenamente, esto “no quiere decir que no tengamos diferencias en algunos temas”; sin embargo, la relación se basa otra vez en la no injerencia en los asuntos internos; la plena vigencia del derecho internacional y, sobre todo, en la amistad y la confianza, dijo.

Respecto de la declaración del presidente Raúl Castro referente a que el gobierno cubano estaría dispuesto a reunirse con el presidente electo de Estados Unidos, Barack Obama, planteó que “esto no es nuevo; ya el propio Raúl Castro y anteriormente Fidel habían planteado en varias ocasiones su disposición de reunirse con las más altas autoridades de Estados Unidos, con la finalidad de encontrar una solución al diferendo histórico que existe entre los dos países, pero con la petición de que el encuentro sea sin condiciones y con pleno respeto a la soberanía de ambos países”.

“¿Hay confianza o esperanza de que con Obama van a cambiar las cosas entre Cuba y Estados Unidos?”, se le preguntó, y dijo: “no lo sé; no lo pudiera decir, una cosa es lo que se dice en las campañas y otra lo que se hace después. Ojalá Obama, que ha demostrado ser un hombre inteligente y que quiere un cambio, entienda que la política de Estados Unidos hacia la isla es absurda y viola los principios del derecho internacional, además de que no le produce beneficios al pueblo estadunidense y le produce mucho daño al cubano y sobre todo que no ha logrado su objetivo de derrocar a la revolución cubana ni lo va a lograr nunca”.

El discurso central de esta conmemoración le tocó darlo al agregado militar, naval y aéreo de Cuba en México, teniente coronel Luis Molina Montes de Oca, quien señaló que los casi 50 años transcurridos desde el primero de enero de 1959 “demuestran fehacientemente que a los millones de cubanos dispuestos a defender la revolución no los mueve un entusiasmo pasajero ni el fanatismo político”.

En la celebración estuvo presente El Cuate, Antonio del Conde, quien fue uno de los que participaron y apoyaron en los preparativos del viaje del Granma, sólo que se embarcó a petición de Fidel Castro.

–¿Cuál es el futuro de la revolución cubana? –se le inquirió.

–Esta revolución no morirá; continuará después de Fidel, porque en manos de Raúl Castro, de Felipe Pérez Roque, de cualquiera, la revolución no va a acabar.