■ Acuerdo parcial de rescate de la industria automotriz hasta por 17 mil millones de dólares
Obama busca reactivar la economía mediante gasto en infraestructura
■ El presidente electo de EU asevera que el plan carretero será mayor que el de Einsenhower
■ “No nos limitaremos a poner dinero; evaluaremos los avances”, dice el próximo jefe de Estado
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Compras de fin de año en la Quinta Avenida de Nueva York. Datos de noviembre señalan que las ventas fueron menores a las previstas por el sector, el cual tiene la esperanza de remontar la situación
Foto: Reuters
Washington, 6 de diciembre. En el país insignia del capitalismo, el Estado saldrá al rescate de la economía. Mientras la nación navega por una recesión que inició oficialmente hace un año, y que probablemente se extienda hasta bien entrado 2009, el próximo gobierno, que tomará las riendas de Estados Unidos a partir de enero próximo, anticipó que empleará recursos fiscales para reactivar la actividad económica y el empleo, con el uso del gasto en infraestructura.
El presidente electo Barak Obama anunció este sábado detalles de un ambicioso plan de infraestructura, el mayor emprendido con fines de reactivación económica desde que hace 50 años, en la segunda posguerra, el país emprendió la construcción del sistema federal de carreteras y autopistas. Como parte de la estrategia para hacer reflotar a la que es hoy la mayor economía del mundo, se prevé la creación de 2.5 millones de empleos y fuertes inversiones en la infraestructura pública y en tecnología.
Obama aseguró que su proyecto incluye la mayor inversión en infraestructura desde la década de 1950, superando las inversiones en la construcción de carreteras que hiciera Dwight D. Eisenhower en aquella época.
Reducción de consumo energético
Señaló que Estados Unidos también hará un gran esfuerzo para reducir el gasto energético del país, aumentar el acceso a Internet de alta velocidad y modernizar las edificaciones de los colegios de la nación.
“Necesitamos acción y acción ahora”, expresó Obama en el programa semanal de radio del Partido Demócrata, un día después de que el gobierno reveló que la recesión de la economía de Estados Unidos provocó en noviembre el despido de 553 mil trabajadores (673 mil incluida la nómina agrícola), la mayor cifra de destrucción de empleo en los últimos 34 años.
Obama, quien asume el poder el 20 de enero, promete realizar rápidas acciones para sacar a la economía estadunidense de la recesión, que ya ha provocado un alza del desempleo a 6.7 por ciento y que podría alcanzar 8 por ciento el próximo año.
El presidente electo comenzó por pedir a su equipo económico la generación de un plan que permita la creación de al menos dos millones y medio de nuevos puestos de trabajo para el 2011.
También se espera que el Congreso apruebe un considerable estímulo económico en enero que podría estar listo para cuando Obama asuma la presidencia.
“Primero haremos un esfuerzo masivo para lograr que los edificios públicos sean más eficientes energéticamente. Nuestro Gobierno actualmente paga la cuenta energética más alta del mundo”, explicó.
Remplazar los antiguos sistemas de calefacción e instalar lámparas económicas en los edificios federales ahorraría millones de dólares a los contribuyentes y además crearía nuevos trabajos, comentó.
Millones de nuevos trabajos también provendrían de “la mayor inversión en nuestra infraestructura nacional desde la creación del sistema de autopista federal en la década de 1950”, dijo Obama.
El político no mencionó sin embargo cifras concretas para sus planes. Algunos medios estadounidenses habían estimado el monto total del programa de inversiones con una suma entre los 150 mil y los 700 mil millones de dólares.
Aseguró que el dinero del contribuyente será “inyectado de manera nueva e inteligente”. “Si un estado no actúa rápidamente para invertir en rutas y puentes, perderá los fondos”.
“No lo haremos a la vieja manera de Washington”, dijo Obama sobre su plan. “No nos limitaremos a poner dinero. Evaluaremos los avances a través de las reformas que hagamos y los resultados que obtengamos, a través de los empleos que creemos, la energía que ahorremos, y si Estados Unidos es más competitivo en el mundo”.
El plan de Obama, que será ampliamente detallado durante las próximas semanas, incluye también la modernización de las escuelas para hacerlas energéticamente eficientes, la instalación de nuevos computadores en las salas de clase y la renovación del internet impulsando el sistema de banda ancha por todo el país
“Necesitamos renovar las autopistas de la información. Es inaceptable que Estados Unidos esté en el puesto 15 en la lista mundial en acceso a banda ancha”, señaló Obama en su programa de radio.
“Aquí, en el país que inventó Internet, todos los niños deberían tener la posibilidad de acceder a ésta, y la tendrán cuando yo sea presidente, porque así es como fortaleceremos la competitividad de Estados Unidos en el mundo”, agregó.
Para modernizar el sistema de salud más caro del mundo, prometió levantar una red informática entre los hospitales que permita a médicos tener acceso a las historias clínicas de pacientes “para evitar errores y ahorrar miles de millones al año”.
Dpa y Reuters
Washington, 6 de diciembre. El Congreso y la Casa Blanca discutían esta noche la instrumentación de un plan acordado el viernes para un rescate parcial de la industria automotriz estadunidense por entre 15 y 17 mil millones de dólares al que sólo podrán acceder si demuestran que pueden competir y restructurarse.
Los fondos para financiar la operación provendrían de un programa de préstamos del Departamento de
La portavoz de la Casa Blanca, Dana Perino, dijo a periodistas que la asistencia sólo se consideraría para aquellas compañías “dispuestas a tomar difíciles decisiones en todos sus negocios para ser viables y competitivas” y agregó que “no se puede pedir ayuda a los contribuyentes si existen altas probabilidades de que no se vaya a devolver”.
El rescate busca evitar el potencial colapso de una o más compañías.
El tema de los fondos había sido el principal obstáculo durante la discusión de la ayuda luego de que las compañías fracasaran en un primer intento por conseguir asistencia del gobierno en noviembre.
Perino destacó que el dinero destinado a respaldar este sector debe provenir de los fondos que ya han sido aprobados por su gobierno, es decir, del dinero que había sido previsto para fomentar la producción de automóviles más ecológicos.
Las automotrices llegaron al Congreso esta semana buscando 34 mil millones de dólares en asistencia, de la cual la mitad la requerían como un crédito inmediato de corto plazo a una baja tasa de interés y el resto como préstamos para el futuro.
General Motors y Chrysler solicitaron el rescate para evitar su bancarrota.
El presidente ejecutivo de Chrysler, Bob Nardelli, dijo a los legisladores que su empresa necesita 4 mil millones de dólares para sobrevivir hasta marzo. Su contraparte en GM, Rick Wagoner, explicó que le hace falta 10 mil millones para el mismo periodo.
Ford Motor quiere 9 mil millones de dólares en créditos que solo usaría si sus finanzas se deterioran más de lo esperado en 2009.
Legisladores en la Cámara de Representantes y el Senado esperan presentar una propuesta a ambas legislaturas la próxima semana para iniciar el debate formal.
“Nada está decidido hasta que todo está decidido”, dijo un asesor legislativo para describir lo que analistas predicen como una difícil discusión sobre cómo estructurar el rescate financiero.