■ Aprueba el Consejo Universitario el presupuesto 2009 por $24 mil 337 millones
Las necesidades de la UNAM superan el volumen de recursos asignados: Narro
■ La infraestructura de la institución, con antigüedades hasta de 50 años, requiere renovarse
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Reunión del Consejo Universitario para analizar el presupuesto de la UNAM para el 2009. Aspecto del pleno
Foto: Jesús Villaseca
El pleno del Consejo Universitario de la UNAM aprobó, por unanimidad, el presupuesto de la máxima casa de estudios correspondiente a 2009, que contempla un total de 24 mil 337 millones 73 mil 934 pesos, en una sesión donde el rector José Narro Robles destacó que por primera vez en 33 años dicha discusión y aprobación se da antes de su ejercicio, situación que contribuye a ofrecer mayor certidumbre al trabajo de la institución.
Aunque se reconoció la “sensibilidad” del Poder Legislativo de otorgar 700 millones de pesos más que lo propuesto por el gobierno federal, el Consejo Universitario consideró que es insuficiente para atender plenamente sus necesidades, además de que el órgano colegiado se manifestó convencido de que la educación pública, gratuita, laica y de calidad, en todos los niveles, es prioritaria para resolver los grandes problemas que enfrenta el país.
En su pronunciamiento, advirtió que defenderá el presupuesto aprobado, a fin de evitar recortes que pudieran afectar la marcha de la UNAM, en perjuicio principalmente de los estudiantes de bachillerato, licenciatura y posgrado.
En la sesión de más de cuatro horas en la Antigua Escuela de Medicina, en el Centro Histórico, los consejeros destacaron la transparencia y el manejo escrupuloso de los recursos. En la presentación del proyecto, se resaltó que como parte fundamental del ejercicio de planeación institucional, la rectoria puso a consideración de la comunidad universitaria el Plan de Desarrollo 2008-2011, que supone 15 líneas fundamentales para el cambio institucional, que representan otras tantas áreas de mejoramiento, hacia las que se deberán orientar los esfuerzos para transformar a la institución.
Momentos antes de iniciar la sesión ordinaria, en entrevista, el rector expresó que las necesidades de la UNAM siempre van por delante de los recursos que se le asignan, pero los que se reciben se ejercen con escrupulosa responsabilidad y eficiencia. A pregunta expresa, Narro se pronunció en contra de la pena de muerte, calificándola de “inadecuada” para atender los problemas de justicia, seguridad e impunidad.
Durante la sesión, y también por unanimidad, el pleno del Consejo Universitario aprobó el nombramiento de los nuevos profesores eméritos Antonio Minzoni Consorti y Bolívar Echeverría Andrade, de las facultades de Ciencias, y Filosofía y Letras, respectivamente. También designó investigador emérito a Enrique Semo Calev, de la Facultad de Economía.
Sólo 5% a burocracia
En el proyecto original del Ejecutivo federal, el presupuesto para la UNAM sería de 21 mil 53 millones 571 mil 934 pesos, pero la Cámara de Diputados autorizó 700 millones de pesos adicionales, que sumados a los 2 mil 583 millones de pesos de ingresos propios, integran un presupuesto total superior a los 24 mil millones de pesos. De esta cifra, 61 por ciento se destinará a la docencia, 25 por ciento a la investigación, 9 más a extensión universitaria, y solamente 5 por ciento a la gestión administrativa, según el proyecto aprobado ayer por el Consejo Universitario.
En la reunión se precisó que la infraestructura de la universidad requiere una profunda renovación, pues en un alto porcentaje cuenta con una antigüedad significativa, más de 50 años en el caso de Ciudad Universitaria, y más de 30 en los planteles de las Facultades de Estudios Superiores, y de las Escuelas Nacionales Preparatorias y del Colegio de Ciencias y Humanidades. Por ello, del presupuesto 2009 se tiene previsto destinar recursos al mantenimiento de instalaciones, revisiones estructurales de edificios y modificaciones arquitectónicas, así como remodelación de aulas y áreas de servicio.