■ Resentirá los efectos en empleo y pobreza, reporta la Cepal
México tiene mayor exposición a la crisis por su cercanía con EU
■ Las remesas inciden en 15 y 20% del PIB de países en Centroamérica
México es un país que tiene mayor exposición a la crisis mundial en cuanto al empleo y la pobreza, debido a la estrecha relación con Estados Unidos y el impacto por la disminución en remesas, exportaciones y turismo, indicó la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), al dar a conocer el informe Panorama Social de América Latina 2008.
El organismo dependiente de la Organización de Naciones Unidas señaló que los países más afectados por la crisis financiera global, surgida en Estados Unidos, cuya economía se encuentra en recesión, serán los que dependan de las remesas o tengan una conexión directa con esa nación y que tengan menos diversificadas sus exportaciones. Tal es el caso de México, cuyo principal socio comercial es el país vecino del norte, a donde se destina alrededor del 80 por ciento del comercio exterior.
En una videoconferencia de prensa desde Santiago de Chile, el director de desarrollo social de la Cepal, Martín Openhayn, señaló que en Centroamérica las remesas inciden entre 15 y 20 por ciento del producto interno bruto y aunque no es el caso mexicano, el envío de dinero que envían los trabajadores mexicanos desde Estados Unidos es el mayor en América Latina, lo que podría influir en las condiciones de vida de las familias receptoras, dijo el funcionario.
Explicó que un segundo elemento es la fuerte vinculación de las exportaciones con la economía de Estados Unidos, que podría hacer que se resienta más en el empleo y servicios, como el turismo.
Cabe recordar que en los primeros 10 meses del año las remesas que los mexicanos mandan, principalmente de Estados Unidos, registran una caída de 1.92 por ciento a tasa anual, a 19 mil 970 millones de dólares, de acuerdo con el Banco de México. “Por todo eso, México es un país que tiene cierto nivel de exposición a la crisis en términos de impacto sobre empleo y sobre pobreza”, dijo Hopenhayn.
Por su parte, la secretaria ejecutiva de la Cepal, Alicia Bárcena, advirtió que la indigencia y la pobreza aumentarán en América Latina a consecuencia de la crisis mundial, lo que también podría afectar los avances de las metas del milenio sobre la reducción de pobreza, tanto por la crisis financiera como por el alza de los alimentos que se registró a mitad del año y que aunque bajaron, no han regresado al nivel previo a la escalada. Precisó que entre 2007 y 2008 los precios de los básicos aumentaron 40 por ciento, mientras que desde el año 2000 a la fecha acumulan un incremento de 148 por ciento.
Al presentar el estudio Panorama Social de América Latina la funcionaria indicó que este año la pobreza disminuyó en 2 millones de personas, al pasar de 184 millones en 2007 a 182 que permanecieron en esa condición este año; sin embargo, la indigencia, o pobreza extrema, subió en 3 millones de personas, debido a que el alza de alimentos afectó a los más vulnerables. En 2007 había en la región 67.8 millones de personas en estado de indigencia y al finalizar este año la expectativa de la Cepal es que la cifra aumentará a 70.8 millones, y va más allá, al advertir que “para 2009 la pobreza y la indigencia pueden aumentar más”, debido a los menores crecimientos económicos que se pronostican en América Latina y el Caribe y que es “altamente probable que el desempleo aumente y afecte más a los pobres”.
Alicia Bárcena señaló que la crisis actual golpea particularmente a las mujeres, quienes ya encabezan los mayores niveles de desocupación y que venían aumentado su participación en la industria.